Producción de Textos, Cátedra B

Universidad Nacional de La Plata

 Facultad de Bellas Artes

Carrera : Música Popular

Asignatura : Producción de Textos, Cátedra B

Lucía Modini

DNI: 30.146.637

Legajo: 69524/5

Bienvenida Realidad

En el SXXI, La producción cultural se encuentra ya industrializada e insertada en el mercado, estas expresiones sociales han diversificado sus modalidades de producción, distribución y consumo con el paso del tiempo. “El sector cultural está compuesto por todas aquellas actividades ligadas a la dimensión artística, moral e intelectual de la vida humana” (*1)

Este tipo de bienes y servicios llamados productos culturales, que son creaciones humanas, tienen un precio en el mercado. Poseen un valor económico y simbólico, esto les da la capacidad de generar riquezas económicas apropiables y de contribuir en el crecimiento de la economía, a partir de esto… surgen los problemas.

Unos pocos controlan los medios de comunicación (entre otros recursos) y así logran subordinar y hasta crear falsos ideales de homogeneidad social en el pueblo que consume sus productos, ya sea por medio de la televisión, la radio, el cine, la música, etc…  En algún punto todos los miembros de estos pueblos que vivimos bajo una organización gubernamental, participamos de este consumo masivo. (actualmente muy criticado) Se han realizado muchos estudios teniendo en cuenta el rating y niveles cuantitativos respecto de la cantidad de personas que participan de este acto de dominación por parte de los sectores adinerados.

 Y como dice la sociología de la cultura, “la organización social del gusto corresponde a una distribución desigual de recursos económicos y simbólicos, a distintas oportunidades de acceso a los lugares donde se forman los estilos de vida.”(*2). Entonces, si por ejemplo nos detenemos en la “Santa Televisión” ¿Cómo realizar una crítica que sea constructiva científica e intelectualmente si desde ya, las bases de nuestro conocimiento y supuestos gustos personales son una construcción del poder político y su orden ya establecido? ¿Cómo atrevernos a criticar a los sectores consumistas de reality shows, telenovelas etc… , y denominarlos programas no-culturales?

Estas cuestiones para ser analizadas deben tomarse desde un punto de vista crítico, pararse fuera de la sociedad y estudiarla atentamente teniendo en cuenta los distintos contextos históricos y sociales. Por ejemplo al momento de hablar de la televisión y el cine, además de considerar la variedad de gustos, el valor de diferentes culturas y otros factores, hay que tener en cuenta que en la pantalla el modo de narrar es sumamente llamativo y de fácil consumo. Se cuentan historias con imágenes y se da escena a las controversias.

Es decir, el instrumento de comunicación es de fácil dominio para quienes lo construyen diariamente, pudiendo en solo minutos sacar y poner desde personajes hasta diálogos que se van construyendo rápidamente, quizá de forma más veloz que nuestra capacidad de recepción de la información… Por lo que no tenemos tiempo de comprender eso que estamos consumiendo y esa información quizá falsa y creada con intencionalidad de control que está ingresando sin pedir permiso en nuestras mentes. Está claro que esto es bien sabido por los dueños de los medios de comunicación, y saben abusar de ello.

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