SOCIEDAD, DERECHO Y ABOGACIA.

SOCIEDAD, DERECHO Y ABOGACIA

1. ANTECEDENTES HISTORICOS Y DOCTRINARIOS

La palabra abogado proviene del latín advocatus que significa “el llamado”. La abogacía nace en Sumeria durante el II milenio a.C y es conocida en Grecia, Roma, Egipto y en la India (con las leyes de Manú). Antiguamente la abogacía era vista como una labor social que otorgaba honor y respeto mas no era una profesión. La abogacía surge como una profesión con la primera división de trabajo, los romanos y griegos la conocen así. La abogacía como profesión en Grecia fue ejercida por ciudadanos libres y de buenas costumbres; formándose en Atenas la primera escuela del foro donde los griegos solicitaban oradores famosos tales como Pericles quien fue considerado como el primer abogado profesional, Demóstenes, Hipperides y Antifón. En Atenas aparecieron los procesos más famosos (caso de la cortesana Friné). En Roma la abogacía aparece con Rómulo al formar el Senado y el pretoriado o defensoría para los menos favorecidos, siendo considerada junto con la milicia y la política una de las actividades más encumbrantes; la abogacía era ejercida por patricios ricos y poderosos. El emperador Justiniano construye el primer colegio de abogados en la cual se exigía como edad mínima 17 años entre otros requisitos. Posterior mente Cicerón escribió un Tratado de los deberes donde se presentan los principios básicos para ejercer la profesión. Durante el periodo de la Republica la remuneración fue permitida mas no obligatoria y también paulatinamente se permitió la integración de plebeyos y libertos a la orden. La abogacía como profesión llego a nuestro país con el Virreinato siendo dictada por primera vez en las aulas de la Universidad Mayor de San Marcos; el primer abogado fue Leonardo de la Rinage Salazar quien llegó a ser rector de la UNMSM y asesor del virrey Manuel Amat y Juniot.  

1. EL ENJUICIAMIENTO SOCIAL DE LA LABOR DEL ABOGADO

Religiosos y Filósofos rechazaron el comportamiento social del abogado. Los religiosos alegan que hay terribles advertencias en el Antiguo y Nuevo Testamento para los abogados y jueces injustos y prevaricadores. El descredito de esta profesión se institucionalizó durante la época del Renacimiento. Otros consideran que la profesión no es una actividad peligrosa, si no, que es inútil. Por otro lado la el ejercicio de la profesión ha sido gravemente amenazada ya sea por el cuestionamiento moral o por las acciones tributarias.

1. EL PAPEL DE LOS ABOGADOS

La importancia de la profesión está en la categoría de los valores éticos del abogado y también en los poderes jurídicos que representan. Del abogado dependen los destinos de la justicia, la paz y la solidaridad. Los servicios que este presta inciden en la libertad, la restauración del honor y patrimonio y a la confirmación de la dignidad. El abogado desempeña diversas actividades que reúnen aspectos tales como el consejo y asesoramiento de para orientar la conducta personal, indulto de consultas, entre otras. Desde otro punto de vista, el abogado colabora con la administración de justicia al traducirle al lenguaje de ley las palabras de su cliente, este también es el que propone a los tribunales la interpretación que adapta la ley a los casos. Actualmente ésta profesión tiene diversas formas de manifestación: como Magistrado, abogado patrocinante, fiscal, notario, jurista, asesor y maestro universitario.

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