Sobre Las Caracteristicas De Las Instituciones Totales

Se llaman stablecimient6os sociales donde se desarrolla regularmente determinada actividad. Proveen el lugar para las actividades que presuntamente confieren al individuo un estatus social, por fáciles y agradables que tales actividades puedan ser; otras brindan la oportunidad de contraer relaciones que se consideran electivas e informales.

Se consideran instituciones totales las que:

 Erigidas para cuidar de las personas que parecen ser a la vez incapaces e inofensivas.

 Las erigidas para cuidar de aquellas personas que incapaces de cuidarse a si mismas constituyen una amenaza involuntaria para la comunidad

 Las organizadas para proteger a la comunidad contra quienes constituyen intencionalmente un peligro para ella.

 Las deliberadamente destinadas al mejor cumplimiento de una tarea de carácter laboral y que se justifican por esos fundamentos instrumentales.

 Los establecimientos concebidos como refugio del mundo, aunque frecuentemente sirven para la formación de religiosos.

La característica central de las instituciones totales puede describirse como una ruptura de las barreras que separan de ordinario los ámbitos de la vida: dormir, jugar y trabajar. Además las actividades diarias están programadas, hay un sistema de normas formales explicitas, y un cuerpo de funcionarios. Se integran en un plan racional concebido para el logro de objetivos propios de la institución.

Existe un manejo de muchas necesidades humanas mediante la organización burocrática de conglomerados humanos, indivisibles. También hay una escisión básica entre un gran grupo manejado que adecuadamente se llama internos y un pequeño grupo personal supervisor.

El personal tiende a sentirse superior y justo; los internos a sentirse inferiores, débiles, censurables y culpables. La movilidad social entre ambos estratos es sumamente restringida, así como el paso de información lo cual proporciona al personal una sólida base para guardar las distancias y ejercer su dominio sobre los internos.

La formación de familias proporciona una garantía estructural de resistencia permanente contra las instituciones sociales; la vida familiar suele contraponerse a la vida solitaria y el contraste más pertinente es con la vida de cuadrilla.

Los internos llegan al establecimiento con una cultura de presentación derivada de un mundo habitual, un estilo de vida y una rutina de actividades que se dan por supuestas hasta el momento del ingreso en la institución. Las instituciones totales no reemplazan la peculiar cultura propia del que ingresa, si algún cambio cultural ocurre derivará tal vez de la eliminación de ciertas oportunidades de comportamiento y la impotencia de mantenerse al día con los cambios sociales recientes del exterior.

Las instituciones sociales crean y sostienen un tipo particular de tensión entre el mundo habitual y el institucional, y usan esta tensión persistente como palanca estratégica para el manejo de los hombres. La barrera que éstas levantan entre el interno y el exterior marca la primera mutilación del yo. El ingreso ya rompe automáticamente con

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