TEORIAS SOCIOPOLíTICAS Y EDUCACIÓN
Enviado por jessiyema • 6 de Noviembre de 2015 • Resumen • 1.842 Palabras (8 Páginas) • 302 Visitas
TEORIAS SOCIOPOLíTICAS Y EDUCACIÓN
El reproductivismo consideraba a la educación como un dispositivo de reproducción de la ideología dominante.
En términos de Marx, el reproductivismo no sería otra cosa que superestructura educativa de la clase dominante.
Los textos de referencia fundamentales de esta corriente fueron:
• “Ideología y aparatos ideológicos del Estado”, de Louis Althusser.
• “La reproducción”, de Pierre Bourdieu y Claude Passeron.
Estas ideas habían tenido gran influencia en las universidades iberoamericanas y caribeñas.
En el párrafo que estamos estudiando, Puiggrós hace referencia a los proyectos educativos neoliberales, que pretenden diversificar el sistema educativo justificándose en la diversidad cultural.
La defensa cultural de los pueblos latinoamericanos que luchan por conservar su identidad es usada como argumento para limitar su acceso a los saberes socialmente productivos en la sociedad digitalizada y globalizada.
Puiggrós dice que los educadores tienen el desafío de brindar un futuro al panorama latinoamericano, comprendiendo las lógicas y estrategias que les permitieron sobrevivir a estos pueblos por más de quinientos años.
Se trata de fortalecer lo propio para incluirse en lo universal, lo que necesita de la suficiente masa crítica de poder cultural para enfrentar a la globalización.
En éste sentido, es fundamental defender el español y el portugués, para que puedan sobrevivir las lenguas aborígenes y utilizar a la globalización para poder acceder a todas las culturas que se pueda, elegir de ellas lo que nos sirva y no quedar sometidos a la cultura dominante.
El plan de la burguesía, muy por el contrario, es mantener a raya a los sectores más vulnerables en nombre de la preservación de sus culturas. La ironía es que fueron estos mismos actores sociales los que mancharon de sangre a toda Latinoamérica y a su cultura nativa por más de cinco siglos.
La relación directa entre clase y sector social de origen y nivel educativo alcanzado es evidente, ya que en la repartición desigual de la preparación para el trabajo les tocan:
• No saberes para los indigentes.
• Educación elemental y con suerte saberes de oficios para los pobres.
• Saberes tecnológicos – profesionales para la clase media.
• Saberes que conforman la clave de los grandes poderes para los ricos.
De este modo, los pobres quedan fuera del sistema educativo, con todas las consecuencias a futuro que eso implica.
Esta tesis del reproductivismo beneficia a quienes pretenden reducir al mínimo a la educación pública, siguiendo las recetas neoliberales que quieren minimizar la oferta de educación del estado a sus ciudadanos, hacer que la inversión pública en educación sea casi inexistente y proporcionar solo información elemental a los pobres.
Así, una de las estrategias que se hizo fuerte, fue la educación selectiva de los “desarrapados” (según los llamaba Simón Rodríguez), que encuentra su fundamento en la “teoría de la resiliencia”. Los trabajos que se basan en esta teoría dicen que ya no hay posibilidad de incluir a las poblaciones excluidas socialmente, aunque dicen lamentar la marginación que produjo la globalización tecnológica. Es decir, primero marginan y después lamentan y excluyen.
Esta teoría debe ser enfrentada por todos los que pretendan realizar aportes valiosos al sistema educativo, ya que afirmar eso, es lo mismo que decir: “Hay pocas posibilidades de salvar a alguien que se está ahogando en un río, mejor dejémoslo morir”.
Según la teoría de la resiliencia, la desnutrición física y cultural que sufren los marginados en los primeros años de vida es insuperable.
Si analizamos ésta teoría, veremos que sus defensores no son más que resucitadores de Malthus.
La teoría de Thomas R. Malthus ha sido revivida en varias ocasiones, para argumentar la necesidad de imponer restricciones educacionales a los sectores marginados de la sociedad y reducir la oferta de educación para las masas.
De esta forma podemos ir atando los cabos teóricos de la clase dominante:
Teorías como las de la “resiliencia” relacionan al nuevo malthusianismo con el neodarwinismo y sirven para diseñar una pedagogía de la selección natural, esto es, la supervivencia de los más fuertes. Todo esto expuesto científicamente, es un arma política de la clase dominante para imponer su ideología de la masacre educativa.
Desde nuestro punto de vista, el rol del educador debe ir por el camino contrario y proteger a los más débiles, en lugar de abandonarlos.
Para Sara Lifszyc, frecuentemente se relaciona diferenciación o diversidad a desigualdad. Pero no siempre la diversidad implica desigualdad.
Este es el punto de partida de su trabajo.
Haciendo un primer paralelismo con el texto de Puiggrós, podríamos afirmar que para la clase dominante, que quiere imponer su dispositivo de reproducción de su ideología, la diversidad siempre implica desigualdad, y su intención es imponer esta idea en todo el mundo educativo.
Para Lifszyc, las personas nos diferenciamos por características genéticas y por otras que traemos con el nacimiento, llamadas congénitas. También nos diferenciamos en gustos y creencias.
Para ella, una de las formas en que se expresa la diferenciación social, viene de las distintas posiciones que las personas ocupan en la sociedad para su reproducción.
La reproducción del particular, reproduciendo asimismo las funciones socialmente asignadas de acuerdo con el lugar que ocupa en la división del trabajo, es un momento de la reproducción social total. De este modo, hay una doble dimensión de la reproducción: desde el punto de vista de los individuos, la condición de su reproducción es la reproducción desde su función; mientras que desde el punto de vista de la sociedad, es la reproducción del conjunto de las funciones diferenciadas.
Pero la diferenciación no debería producir necesariamente desigualdad. Sin embargo, la autora nos dicen que en la historia hay
...