UTOPÍA Por Tomas Moro

UTOPÍA De Tomas Moro

Utopía es una obra muy detallada ya que, describe a la República o Estado de Utopía y a su ciudad principal Aumarota por completo. Es una descripción tan perfecta que podría decirse que en realidad, es un lugar que no existe. Pero que a pesar de ello, en este relato hay muchas cosas que decaeríamos ver realizadas en nuestras ciudades.

Como lo sería; el tener todas las ciudades dotadas de viviendas, hospitales, calles en buen estado, mercados abastecidos, seguridad, ríos limpios, que nos respetemos unos a otros, tener también un buen trabajo y gobierno; como se puede percibir en utopía.

A pesar de que Tomás Moro, autor de la obra, no recuerde con exactitud donde se encuentre Utopía, dice que está ubicada en el nuevo mundo, es una isla de unas decientas millas con la forma de la luna en el cuarto creciente, que tiene un puerto, arrecifes y bahías peligrosas.

Relata también algo de su historia, donde Utopo luego de tomar la isla que entonces se llamaba Abraxa la llamó Utopía, y la creo como nación, estaba unida a un continente y la mandó a cortar. Utopía según Moro, cuenta con cincuenta y cuatro ciudades iguales en su lengua, costumbres y leyes, donde la más importante, se considera que es Amaurota, ubicada en el centro y es donde se encuentran los diputados.

Para ellos no debe hacer falta lo que verdaderamente se necesita. Y es así que, más adelante se puede apreciar que, no existe la propiedad privada, pues, cambian cada diez años las casas mediante sorteo; casas que están dotadas por cosas agrícolas y bellos jardines, a razón de que los utópicos se consideran cultivadores y no dueños de sus tierras.

En vista de ello decimos que, el miedo a las privaciones es el motivo que hace egoístas y avaros a todos los seres vivientes y en el hombre el orgullo, pues le hace distinguirse de los demás; y como se aprecia en las instituciones de utopía estas no toleren de modo alguno esto.

Por otro lado, sus sistemas ejecutivo y legislativo se rige por los estudiosos que son: los sacerdotes, los triniboros y el príncipe, además de los sifograntes que son los diputados. Que en este caso, por cada treinta familias se elige a un magistrado cada año. Llegando a tener doscientos sifograntes que, a través del voto secreto eligen a un príncipe entre los cuatro que presenta el pueblo, y cada cuarta parte de la ciudad nombra un aspirante y lo propone. Este príncipe puede ser destituido por dudas en su gestión, también se destituye por ser un tirano o un dictador.

En relación al trabajo, los hijos en la mayoría, heredan el oficio de sus padres peor sí quiere ejercer otro oficio, este puede ser adoptado por otra familia que la desarrollé, cuya familia debe ser honrada. También se puede ejercer dos oficios al mismo tiempo, a no ser que la cuidad necesite que se dediqué más a una.

Al igual que en nuestro país, al día sólo se labora 6 horas, pero además de ellos en Utopía, sí sé es necesario estas disminuyen cuando ya se hayan cumplido las actividades relacionadas a este.

Los utópicos consideran que, el trabajo es más provechoso que la muerte de la persona que realiza un delito grave, y a su vez sirve de ejemplo para los demás. También se tiene a los jornaleros extranjeros, respetados por su constancia y ganas de trabajar aun sabiendo que están en otra nación.

En relación al matrimonio, se puede decir que sí se realiza el acto carnal ilícito antes del matrimonio y no se tiene la edad requerida, se castigará severamente y ya no se podrán casar, a no ser que se les perdone su acción por parte del príncipe. Parte de esta acción ilícita se les atribuye también a los padres que no se percataron de ello.

Los utópico en la elección del cónyuge, no pueden casarse hasta no ver por completo el cuerpo de la otra persona, ya que como dice Moro, para la elección del cónyuge, la cual nos puede llenar de placer o de pesar, es para el resto de nuestra vida. Pero sí se casan a pesar de esto y la persona tiene alguna deformada que sea desagradable, no se podrá divorciar, ya que este sólo se permite en caso de adulterio o de inmoralidad, donde una vez comprobada sí se podrán casar nuevamente. Es aquí entonces, donde nos quieren decir que, no hay que ser tan descuidados al juzgar el valor de una persona con el sólo ver parte de ella. Vale mencionar que, nadie puede usar como excusa para divorciarse, que el otro cónyuge tenga una enfermedad grave, ya que se considera algo inhumano por parte del que lo afirma.

Al igual que en la mayoría de los países en a la actualidad, se puede dar la separación por el libre acuerdo de las partes, a causas de la incompatibilidad de caracteres, pudiendo cada uno casarse otra vez con quién quisieran.

En cuanto a su sistema judicial; se percibe que, no existe

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