Una de las historias
Enviado por gaaely20 • 25 de Julio de 2012 • Ensayo • 542 Palabras (3 Páginas) • 703 Visitas
ENSAYO
Zweig nos lleva por la vida de un personaje interesantísimo. Una fiera en la política. Igual sirvió a la Revolución, que al Imperio, que a la restauración monárquica de Francia. Fouché, el asambleísta que vota a favor de guillotinar al rey Luis XVI y su esposa, María Antonieta. Fouché, el “Ametrallador de Lyon”, enviado por el Comité de Salud Revolucionaria a masacrar esa ciudad. Fouché, el jacobino que arrasa iglesias. Fouché, que cae en desgracia pero resurge para convertirse en ministro de policía. Fouché, el que acaba clausurando el club jacobino y derrotando a Robespierre, cuya cabeza rueda bajo la guillotina como la mayoría de sus colegas revolucionarios.
Pero no la cabeza de Fouché, quien es el sobreviviente político por excelencia. El que mueve los hilos de poder. El que se alía con la bella Josefina para traer de regreso al popular general Bonaparte de regreso a Francia. El que establece una relación tortuosa, mutuamente benéfica, con el emperador Napoleón. El plebeyo que finalmente se convierte en Duque de Otranto.
Fouché, el que es cesado por un Napoleón desesperado por sus derrotas militares pero, luego, cuando Bonaparte vuelve al poder después de su exilio en Elba, lo reinstala como ministro de policía. Y es que lo prefiere cerca. Pero es el mismísimo Fouché quien, cien días después, le informa que nuevamente será desterrado ahora a la lejana isla de Santa Elena.
Fouché, otrora revolucionario, otrora ministro imperial, ahora ministro de policía del rey Luis XVIII, hermano de Luis XVI, aquel que Fouché había votado a favor de decapitarlo años atrás.
Una historia de supervivencia pura del poder detrás del poder en cual podemos ver el uso de la manipulación. Del supremo maniobrista que utiliza, como pocos, la información a su favor.
El que acaba pasando por arriba de Robespierre, Napoleón y Luis XVIII pero, por increíble que parezca, cuando él tiene la oportunidad de tomar el poder en Francia, no se atreve. ¡No lo acepta! Porque Fouché es una persona que refiere estar detrás del telón dictando la obra.
La biografía de Zweig provee capítulos de gran intensidad. La votación, por ejemplo, de la Asamblea Nacional para guillotinar al rey. Se trata de uno de los episodios más importantes de la historia de Occidente.
La idea que una asamblea representativa del pueblo, dominada por plebeyos, puede votar por cortarle la cabeza a un monarca cuya soberanía supuestamente devenía de Dios mismo. Todo por la revolucionaria idea de que la soberanía es popular. Fouché se debate cómo votar. Sabe que su voto tendrá consecuencias. Y Zweig nos narra aquellos días decisivos para el personaje y la historia mundial.
Pero nada como la relación de Fouché con Napoleón fueron dos locos muy ingeniosos. Dos hombres de poder pero cada uno con un estilo diferente.
Bonaparte el líder. Fouché
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