Una estrella en el corazon

UNA ESTRELLA EN EL CORAZON

 (Adaptación de Sor Guadalupe González Malvaes)

NARRADOR: Hace mucho tiempo había una manzana que se consideraba hermosa pero al mismo tiempo era muy vanidosa. Un día un gusanito se le acercó y le dijo

GUSANITO: Manzana ya te diste cuenta que las estrellas son más bellas que tú porque brillan y dan mucha luz.

NARRADOR: La manzana se quedó pensativa y a partir de aquel momento, se puso a observar las estrellas y al constatar que el gusanito tenía razón, quiso tener una estrella.  Así que se dio a la tarea de buscar la forma de tener una. En su búsqueda se encontró con una abejita y le preguntó.

MANZANA: Abejita tú que vas de un lugar a otro, podrías decirme cómo puedo hacer para tener una estrella.

ABEJITA: Muy sencillo hazte un tatuaje en forma de estrella y listo.

MANZANA: No yo no quiero un tatuaje, lo que deseo fuertemente es tener una estrella.

ABEJITA: Es imposible que tengas una estrella.

NARRADOR: La abejita sin dar mayor importancia a lo que decía la manzana se alejó. Así que la manzana siguió en su búsqueda, en el camino se topó con una ardilla y le dijo.

MANZANA: Querida ardilla, podrías decirme cómo hacer para tener una estrella.

NARRADOR: La ardilla se quedó pensativa y después de un instante contestó

ARDILLA: Tal vez si brincas y brincas podrás alcanzar una estrella.

MANZANA: Es imposible que yo pueda saltar, a lo más que puedo llegar es a rodar.

ARDILLA: Lo siento manzana, no puedo ayudarte.

NARRADOR: Y desilusionada por no tener respuesta a su deseo, la manzana siguió su camino hasta que de pronto vio a lo lejos a un sembrador y rodó hacía él.

MANZANA: Querido sembrador, tú que cada noche observas las estrellas y siembras las semillas y las ves crecer. Podrías decirme ¿cómo puedo tener una estrella?

SEMBRADOR: Pero querida manzana, no te has dado cuenta que tú llevas una estrella en tu corazón.

MANZANA: Y donde está que no la veo.

SEMBRADOR: Para poderla ver necesito partirte en dos y eso es doloroso.

MANZANA: No importa, yo quiero ver mi estrella.

NARRADOR: El sembrador tomó un cuchillo y colocando la manzana con el rabito hacia un lado la cortó. Apenas tuvo las dos partes descubrió al centro una hermosa estrella que enseguida mostro a la manzana.

SEMBRADOR: Mira manzana está es la estrella que siempre has llevado en tu corazón pero que era necesario partirte en dos para que pudieras verla.

MANZANA: Pero esa estrella no brilla, yo quiero verla brillar.

SEMBRADOR: Para que tu estrella brille es necesario morir para que otros tengan vida. Si, cuando tú alimentas a otros mueres a ti misma, pero sólo así podrás brillar.

MANZANA: No importa que muera con tal de brillar.

NARRADOR: El sembrador continúo cortando la manzana y ofreciéndola a los que estaban cerca y cada vez que alguien comía un pedazo de manzana sonreía. Finalmente la estrella de la manzana brilló en cada sonrisa.

...