Ensayo pelicula La ballena: El peso del pasado y la redención desde las profundidades

La ballena: El peso del pasado y la redención desde las profundidades

La ballena (The Whale, 2022) es una película dirigida por Darren Aronofsky. La película se basa en una obra teatral del mismo nombre escrita por Samuel D. Hunter y Aronofsky quien logra capturar la esencia de la obra en su adaptación cinematográfica; se adentra en el drama y la introspección, y nos sumerge en una historia desgarradora y conmovedora a lo más alto de su capacidad expresiva, brindándonos una agobiante metáfora de libertad en la tan ansiada reconciliación que cada hombre busca consigo mismo.

El objetivo de este ensayo es explorar las implicaciones filosóficas de esta película, tratando de ver que hay detrás de la trama, los personajes, los temas que ahí se abordan, las simbologías y de más.

Primeramente, se habla de la historia de Charlie, un hombre con obesidad mórbida y solitario que vive en un pequeño departamento en Idaho, con conflictos culposos. Presenta una depresión que entre sus causas entra el fracaso de su matrimonio y el brutal alejamiento de su hija, Ellie, que cuando apenas contaba con 8 años de edad abandonó. A todo eso se le suma su homosexualidad que fue, en última instancia, el desencadenante de la tragedia familiar: sedujo a un estudiante, quien también fallece y de cuya desgracia Charlie también se siente responsable. Y así es como todo confluye en su drama físico, pero fue su reencuentro con su hija distanciada, lo que lo lleva a buscar redimirse y reconectar con su «él mismo» interior, que lucha por escapar del trauma que lo tiene atrapado. 

Elie por otro lado es una adolecente rebelde y enojada que proyecta demasiada frustración en el filme, lucha por encontrar su lugar en el mundo y justo representa parte por la que pasan algunos jóvenes en su adolescencia, una falta de identidad, y manejo de sus emociones entre otras cosas.

A lo largo de la cinta, los personajes enfrentan sus demonios internos y buscan el sentido de la vida y la autenticidad en sus relaciones. Juntos presentan una amplia gama de identidades y roles sociales como la paternidad, la religión, problemas de salud y la homosexualidad. La película también aborda apartados más profundos como la soledad, la autodestrucción la redención, el amor, la familia, y la fe. Estos se entrelazan en que la búsqueda de rendición y autenticidad en las relaciones humanas vinculandose con la responsabilidad y la libertad individual, mientras que el concepto de amor y sacrificio en la película puede remitir a las reflexiones sobre el amor como el impulso hacia la virtud y la trascendencia.

Charlie es un personaje que sufre de una creciente autodestrucción física y emocional. Su obesidad deja saber que es una metáfora de su aislamiento y su incapacidad para lidiar con sus emociones, pero lejos de eso tiene más trasfondo que es lo que lo llevó a tener esa calidad de vida, ya que solo se necesita de un trauma, o un problema no abordado para ser la semilla que traiga consigo este tipo de problemas físicos y mentales que lleve a la larga a un deterioro de salud y en este caso la inevitable muerte.

Nos muestran a un personaje enorme con una obesidad mórbida que le impide mantenerse en pie si no es con un andador, es un profesor universitario que da cursos a distancia de literatura con la cámara de su computadora siempre apagada. Casi nunca sale de su casa, incluso, ni para recibir o despedir a la enfermera; más amiga que profesional, Liz, que lo cuida casi como una madre, excepto para entrar la comida que le deja el repartidor el cual en una ocasión esperó a que él saliera para verlo y posteriormente lo juzgara por su apariencia, lo que resultó en una intromisión violenta a su intimidad. Al verse expuesto en contra de su voluntad, Charlie volvió a entrar en crisis y por eso lo vimos comer bestialmente cerca del final de la película. Comer, como acto carnal, era lo único que lo hacía sentir bien, aunque eso terminara matándolo.

Aquí, lo curioso del asunto es que Charlie llevó exactamente el proceso contrario de Alan. La depresión por haber perdido a su novio, y por estar distante de su hija, lo llevó a comer en exceso, pero el objetivo era el mismo: morir. Charlie sabía exactamente las consecuencias de su comportamiento, y cuál era el final. Y la razón por la que no quería acudir a un hospital era doble: no quería que sus cuentas médicas afectaran el fondo que tenía destinado para Ellie, y lo más importante, Charlie no quería ser salvado. Y he aquí un punto importante, Charlie quería vivir solo lo suficiente para arreglar sus cosas con su hija, no más.

Ahora abordaremos la razón por la que Ellie odia tanto a Charlie y es principalmente porque la abandonó, pero a medida que avanza la película vemos que el asunto no fue como la chica lo plantea. Sí, efectivamente, Charlie mantenía un matrimonio de conveniencia con Mary, muy probablemente para mantener su homosexualidad oculta. Cuando Charlie conoció a Alan y tomó la decisión de romper su familia para construir algo, que a diferencia de lo que tenía con Mary fuera real. Charlie estuvo dispuesto a ser parte de la vida de Ellie, pero Mary solicitó la custodia absoluta, el juez también dispuso que Charlie pagara manutención, pero más allá de eso, pagó todos los gastos de Ellie. Mary habiendo superado que su marido la hubiese dejado por otro hombre, no permitió que Ellie viera a Charlie, en vista de las actitudes violentas y agresivas de la chica, temiendo que su ex-esposo pensara que ella era una mala madre como lo cuenta casi al final de la película. Y luego, por temor a que Ellie fuera a herir a Charlie, no sólo mental y emocionalmente, sino incluso físicamente. La distancia provocó en Ellie un profundo resentimiento hacia su padre, que, combinado con su actitud agresiva, es lo que vemos en pantalla cuando ambos interactúan.

Por supuesto, Ellie le enrostra todos sus reproches y resentimientos, y en un texto insultante, escrito en tres renglones en el que le llega a mostrar una pisca de amor, el cual le demostraba a Charlie que estaba logrando vencer los recios muros de reproche levantados por su hija, consiguiendo así, de a poco el perdón. Se habla de un ensayo que realizó ella y el que prácticamente fue el único recuerdo que obtuvo de su hija en ocho años, Charlie realmente admiraba el ensayo por su honestidad. Como profesor de literatura de nivel universitario, Charlie había dedicado su vida a utilizar patrones y modelos rígidos para que sus estudiantes «aprendieran» a escribir, y por tanto debía revisar durante año cientos y cientos de escritos donde los redactores diluían su propia voz, en un mar de reglas y parámetros.

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