Indicaciones y contraindicaciones del uso de la amalgama en la consulta dental

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INDICE

INTRODUCCIÓN        3

1. PLANTEAMIENTO DEL PROBLEMA        3

2. JUSTIFICACIÓN        6

3. OBJETIVOS        7

Objetivo general        7

Objetivos específicos        7

4. METODOLOGÍA        7

Población de estudio y muestra        9

Criterios de inclusión, muestra opinatoria        9

5. MARCO TEÓRICO        9

6. REFERENCIA BIBLIOGRAFICA        14

INDICACIONES Y CONTRAINDICACIONES DEL USO DE LA AMALGAMA EN LA CONSULTA DENTAL EN PERSONAS DE 18 A 20 AÑOS EN TUXTLA GUTIERREZ CHIAPAS

INTRODUCCIÓN

Son ya alrededor de dos siglos de la era contemporánea, que la Odontología cuenta con un material que desde  su aparición ha sido considerado un pilar de la odontología restauradora y que de igual manera ha sido controversial. Dado a que siempre ha existido una gran polémica debido a la composición de la amalgama, ya que esta incluye mercurio, elemento que es altamente tóxico para los seres humanos, pero que a pesar de ello, el contenido en la amalgama dental está muy por debajo de los niveles que se han establecido como normales y que rigen la pauta para considerarlo no tóxico.

La amalgama es un material de restauración directa que nos brinda propiedades ideales que cumplen con la función restauradora. Además, de otras características que lo hacen un material competitivo y uno de los más empleados por los odontólogos. Desde hace algunas décadas se han venido creando acuerdos para promover su salida del comercio de los materiales dentales de todo el mundo.

Por tal motivo, en el anteproyecto de investigación se hace hincapié sobre las propiedades y cualidades que tiene la amalgama dental así como las repercusiones que trae consigo en el medio ambiente, reconociendo en primer lugar las ventajas y desventajas del uso de este material dental en la población en general. Por otro lado, este trabajo se centra en las alternativas posibles ante la reducción del uso de este material dental. 

1. PLANTEAMIENTO DEL PROBLEMA

La amalgama ha sido relacionada con la aparición de enfermedades que afectan principalmente el sistema nervioso central y riñones, en las cuales se han encontrado niveles de mercurio superiores a el resto de la población, es por ello que este material se ha visto rodeado en una gran polémica, por tal razón se buscará conocer si en verdad se trata de un material que ya no debe utilizarse.

Toda esta polémica que se ha  venido dando alrededor del mundo pareciera indicar que la amalgama dental no permanecerá por mucho tiempo como material de restauración directa en la odontología, pero esto sucede debido principalmente a los problemas de contaminación actuales. Por otro lado, como veremos este material posee cualidades tales que la ubican como primera elección en muchos casos, en comparación con las resinas que son el principal material con el cual compite hoy en día la amalgama (Castro, 2006). No obstante también es muy notorio que su uso ha disminuido de una forma muy drástica desde la década de 1990.

A pesar de que en la actualidad se está presentando una guerra en contra de la aplicación del amalgama dental, en muchos lugares se está contraindicando, básicamente se limita su uso en aquellos lugares o zonas en donde la estética es esencial, y aunado a esto, cuando el paciente tiene antecedentes de hipersensibilidad o alergia a algún tipo de metal.

De igual forma, en países desarrollados en que la amalgama se está restringiendo, se evita su uso principalmente en niños menores de 6 años o en mujeres embarazadas o en lactancia, o pacientes que padezcan enfermedades respiratorias como en el caso del asma.

Una gran discusión ha tenido lugar en las últimas décadas con respecto a los efectos adversos e inclusive hasta se ha llegado a hablar de envenenamiento de personas portadoras de amalgama dental, y en particular el mercurio contenido en ella que ha sido señalado como el culpable debido a que se tratar de un agente tóxico que ocasiona serias consecuencias a la salud, principalmente enfermedades de carácter neurológico (Castro, 2006).

Como ya se mencionó anteriormente, la amalgama se ha venido usando desde tiempos inmemoriales, y actualmente se puede afirmar con toda seguridad, que una buena aleación para amalgama puede ser manejada para que permita una permanencia en boca de hasta 15 años en promedio, aunque ya se han documentado casos en los cuales las amalgamas han permanecido en boca hasta por 40 años o más (Castro, 2006).

No obstante,  la aplicación de la amalgama tiene una relación directa con los hábitos de cada individuo y también con el manejo del material durante su colocación en cada pieza dental.

Aunado a los opositores en contra del uso de este material, la Organización Mundial de la Salud (OMS) ha venido respaldando desde el año 1991, en el cual se hacía la recomendación de disminuir la exposición de mercurio contenido en todo tipo de productos incluyendo fármacos y cosméticos, razón por la cual la amalgama dental entró también en controversia debido al contenido de mercurio en su composición y del resultante de procesos industriales (Castro, 2006).

De los primeros estudios realizados por expertos de EUA y Suecia en la que realizaron una comparación en torno a las personas que se han aplicado amalgama dental y personas que no han hecho ninguna restauración dental. En este sentido, se llegó a la conclusión de que todas las personas que portan amalgamas en boca tienen concentraciones más elevadas de mercurio en los tejidos, comparado con aquellos no portadores, pero esto de ninguna manera representa evidencia de efectos adversos al mercurio (Castro, 2006).

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