BOB (See Bob Run)

BOB (See Bob run) es una de las más representativas obras de la nueva dramaturgia canadiense underground, cuyo principal exponente es Daniel MacIvor. Ahora tenemos la oportunidad única de conocer esta pieza fundamental del teatro actual de la mano de la compañía Teatro Forte con la coproducción de la Fundación Rajatabla, bajo la dirección de Vladimir Vera.

En ella, la joven actriz Graziella Mazzone, hija de dos reconocidos actores, Dora Mazzone y Jean Carlos Simancas, encarna a Roberta, conocida por sus amigas como “Bob”, una chica que hace auto-stop en busca del mar y de su padre, al tiempo que narra una historia llena de altibajos sentimentales, violencia e incesto, que la llevarán al más extremo desenlace, mientras la bailarina Amneris Ramírez da vida en la escena a las sombras y traumas de su vida. –

La obra cuenta con un vestuario realizado por la diseñadora Fedora Freites (cuyo trabajo le el Premio Tespo como Mejor Vestuario), una planta de luces original del director de fotografía Valentín Atías, música en vivo de Juan Sebastian Blanco, la asistencia de dirección de Michelle Álvarez y la producción de Adriana Bustamante.

ob (See Bob Run), de 1989, es una de las más representativas obras de la dramaturgia canadiense underground, cuyo principal exponente es Daniel MacIvor (23 de julio de 1962). Graziella Mazzone es la encargada de retomar la piel de Roberta, conocida por sus amigas como Bob, una chica que hace auto-stop en busca del mar y de su padre, mientras narra una historia llena de altibajos sentimentales, violencia e incesto, los cuales la llevarán al más extremo desenlace. Michelle Álvarez es la asistente de dirección.

Roberta, mejor conocida como "Bob", narra una historia llena de altibajos sentimentales, incluyendo un terrible incesto, que la conduce al más extremo desenlace. La joven Graziella Mazzone, hija de Dora Mazzone y Jean Carlo Simancas, da vida a este intenso unipersonal, apoyado en escena por la bailarina Amneris Ramírez, quien representa las sombras y traumas de la protagonista.

"Es una chica de 22 años en cuya historia puedes ver y reconstruir su grado de esquizofrenia. Es un relato extremadamente fragmentado que rompe con toda estructura", explica Vladimir Vera, quien se vale además de música en vivo para su puesta en escena.

Para el director, el texto habla en el fondo de la violencia intrafamiliar y cómo esta se refleja en el entorno, "me interesa ver cómo esta chica siendo víctima de la violencia debe llevar una vida aparentemente normal".

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