Mi Vida En Rosa

Mi vida en rosa

La película relata la historia de Ludovic, un pequeño niño de siete años que se muda con su familia a un vecindario desconocido en busca de una nueva vida. Sus padres, deciden realizar una fiesta para conocer a sus vecinos y justo cuando la familia se está presentando ante ellos aparece Ludovic vestido como una niña.

Ludovic, comienza a creer que algún día dejará su cuerpo de niño para convertirse en una chica y poder casarse con su amigo Jerome, de quien estaba enamorado. Sus padres comienzan a creer que Ludo solo está en una etapa experimental y pronto dejaría de concebirse como una niña para empezar a comportarse como un varón.

Diferentes situaciones comenzaron no solo a complicar la vida de Ludovic, sino también la de sus padres y hermanos. En una ocasión, Lodovic y su amigo Jerome jugaron a casarse, Ludo asumió en papel de la mujer pues se sentía identificado con ese género, la madre de Jerome los descubrió y la vida de Ludo comenzó a tornarse tensa.

Sus padres creyeron que lo que hacia el pequeño no era correcto y comenzaron a pensar que necesitaba ayuda psicológica. Pero Ludo no dejaba de pensar que algún día llegaría a ser una linda niña, situación que comenzó a incomodar sus padres y a sus vecinos

La relación que mantenían con sus vecinos empezó a volverse difícil, pues ellos eran incapaces de comprender a Ludo y a su familia. La intolerancia y la ignorancia era lo que los caracterizaba, lo peor de todo era que esa misma intolerancia la transmitían a sus hijos, quienes en la escuela no dudaban en molestar a Lodovic, a tal grado de llegar a la violencia física, consideraban que la condición del pequeño era una enfermedad.

La película narra las dificultades a las que tiene que enfrentarse Ludo y su familia, debido a la personalidad que empieza a desarrollar, él amaba usar ropa de niña y ponerse maquillaje porque eso lo hacía sentir hermoso. Ludo se definía así mismo como un niño-niña, esto después de que su hermana le hablara acerca de cómo se define el sexo biológicamente.

Los padres del pequeño comienzan a fallar en un principio, su madre aunque era incapaz de asimilar la situación se muestra menos severa con él; a diferencia de ella, su padre se vuelve distante. Conforme la situación fue avanzando y el rechazo de los vecinos hacia Ludo comienza a ser cada vez más evidente, su padre reacciona e inclusive se vuelve más cercano. Él empieza a asimilar la situación y como buen padre lucha para que sus hijos vivan en una ambiente de unidad, y eso únicamente se vuelve posible cuando la familia se muda nuevamente.

Para fortuna de Ludovic y su familia, cuando se cambian al nuevo vecindario conocen a una madre y su pequeña hija Christine quien también padecía de un trastorno de identidad, pues Christine se identificaba con el género masculino, situación que sin duda alguna representó algo positivo

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