Performance

Performance

Comúnmente asociamos el performance con artes escénicas como el teatro, sin darnos cuenta que hay muchos más elementos vinculados con este tipo de expresión artística.

En lo personal, no había abierto los ojos a la amplia variedad de disciplinas que pueden ser aprovechadas para darle un toque especial y esencial a un performance determinado. Es como jugar y manipular distintos ingredientes, de tal manera, que como resultado nos darán un suculento plato. Lo mismo sucede con el performance, nos valemos de ingredientes como la música, la danza, la voz, las artes plásticas, para lograr un propósito en una obra. De esta manera, se puede decir que es un arte híbrido.

De este modo es importante señalar que el cuerpo del artista es el soporte principal de la obra. El performance está ligado a acciones físicas del artista (expresión corporal, expresión oral, etc.), y estas acciones, en mi opinión, lo convierten en un medio de expresión dinámico que, a su vez, lleva intrínseco un trasfondo intelectual.

Este trasfondo no es más que ideas, metáforas y situaciones que describen nuestro sentir, el cual plasmamos en él cuando algunas veces las artes convencionales no son suficiente para comunicarlas. Está lleno de subjetividad, cada quien estampa sus gustos y particularidades al momento de actuar. Puede influir de gran manera nuestra formación y experiencias personales.

Como conclusión, el performance es un reflejo de nuestra cotidianidad expresada de forma no convencional y llevada de manera directa, al espectador. En mi opinión el performance va más allá del teatro o la mímica, éste puede simbolizar algo muy complejo filosóficamente, como también algo simple que no necesite mucha comprensión lógica y finalmente presentándose, haciéndose perceptible y evidente.

Joel Polo

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