Administración. Frederick Winslow Taylor. Sus principios, y su aplicación en la actualidad

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Administración.

Frederick Winslow Taylor.

Sus principios, y su aplicación en la actualidad.

Francisca Flores.

        Grupo 2461.

Introducción.

        Frederick W. Taylor es considerado el padre de la Administración Científica, y su valioso aporte sigue vigente hasta el día de hoy.

        A continuación, se detallarán tres de sus principios con ejemplos para su aplicación en el mundo laboral el día de hoy.

Breve Biografía.

Frederick W. Taylor (1856-1915) fue un gerente estadounidense, ingeniero mecánico y consultor administrativo. Es considerado el padre de la Administración Científica por cuanto promovió la organización en el trabajo mediante métodos que consideran los materiales, el equipo y las cualidades de cada individuo.

        En 1911 publicó su libro Los Principios de la Administración Científica. Es un escrito fundamental de la organización moderna, y referente hasta el día de hoy pues sus apreciaciones resultan muy actuales.

Principios.

        Los siguientes, son tres de los cuatro principios que promovía Taylor.

1. Selección y entrenamiento del trabajador: Taylor recomienda una selección según las aptitudes y habilidades de cada trabajador. Él considera que cualquier persona es apta para, al menos, una ocupación.

El propósito de este principio es ubicar al trabajador en aquél puesto de trabajo para el que resulte más competente con la finalidad de obtener la mayor eficiencia. De este modo, se produce un mejoramiento del ambiente laboral de aquel trabajador. Sin lugar a dudas, se hace necesario capacitar al empleado para el puesto de trabajo específico que va a realizar, y un mejoramiento constante.

        En la actualidad, este principio es aplicable de la siguiente manera:

• La empresa debe definir y describir el puesto de trabajo, detallando las funciones y tareas a realizar a fin de contratar a la persona más adecuada para dicha tarea.
• Teniendo contratado al trabajador, la empresa proveerá de herramientas y equipos para que la tarea sea desarrollada.
• En el proceso de inducción, se le explica al trabajador cuáles serán sus funciones y responsabilidades, cuál es el objetivo de su trabajo, cuáles son sus tareas y la mejor forma de que llevarlas a cabo.
• A medida que el trabajador adquiera más experiencia, en lo sucesivo se le irá reforzando para generar un mejoramiento en su desempeño.

1. Cooperación y remuneración por rendimiento individual: Es necesario arraigar la idea de que los intereses del empleado son los mismos intereses que tiene el empleador. Para lograr este propósito, se propone un incentivo económico en base al alcance de metas, de manera tal que el empleado trabaje y produzca más, y así gane más, y que de paso no eluda el trabajo.

Ahora bien, el incentivo no necesariamente deba ser económico. Existen variados estímulos que se pueden brindar, y que mantendrán motivado al personal. Entre ellos, podemos mencionar seguro médico, incentivos recreativos, horarios flexibles, entre otros.

En el libro Cómo ganar amigos e influir en las personas, de Dale Carnegie se hace mención de un hecho bastante particular. Un empleador pregunta a sus empleados qué quieren obtener de él. Los empleados mencionan cosas como pausas para el café, una mesa de ping-pong, la posibilidad de retirarse más temprano por una emergencia familiar, etc. El empleador anota todo eso, y se compromete a darles todo lo que pidieron. Acto seguido, les pregunta qué puede esperar él de ellos; uno de ellos responde que puede quedarse después del horario cada vez que se requiera, otro que puede trabajar los sábados si es necesario, otro se compromete a llegar más temprano. En definitiva, el empleador mencionaba que no era difícil complacer a los empleados, y a cambio él obtuvo lealtad y compromiso.

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