CRITICA COCA COLA

4. Elaborar una crítica fundamentada sobre el comportamiento de esta empresa en términos de sus valores empresariales, la honestidad de su publicidad, el impacto medio ambiental de sus envases plásticos y la eficacia de su política de reciclaje en los países en vías de desarrollo.

El residuo menos contaminante es el que no se produce.  Dicho en otras palabras, no es más sustentable  el que más limpia, sino el que menos contamina. Pero si la evidencia  choca con los intereses de marca, entonces la estrategia y planificación puede cambiar / transformar  hasta la contradicción.

“Coca Cola y un mundo lleno de basura”, un documental realizado por la cineasta francesa Sandrine Rigaud, tiene su punto de partida en Hawái, en pleno Océano Pacífico. Allí, en esas islas tan alejadas, la basura plástica cubre las orillas, ofreciendo una postal apocalíptica en donde los envases con etiquetas rojas no pasan desapercibidos.

Coca Cola, importantísima multinacional conocida a nivel mundial, vende anualmente más de 120 mil millones de botellas en todo el mundo, lo que equivale a casi 4.000 botellas por segundo. Mientras el ambiente y el entorno natural, sobre todo lo marino, se siguen inundando de plásticos, con la lamentable cooperación de la marca Coca-Cola, esta misma marca se atreve a impulsar su campaña publicitaria hacia “Un Mundo sin Residuos”. En donde el único propósito de la compañía con esta acción es un claro beneficio de reputación sin ningún objetivo claro en pro del ambiente, retirando los residuos de aquellos lugares “en los que nunca debieron estar: las playas, las reservas marinas y el fondo de mares y océanos”, como bien reconoce la multinacional de los refrescos. 

Sin embargo, en países sub desarrollados como Tanzania, lejos de la sede de Coca Cola en Estados Unidos, y de la mirada de la comunidad internacional, se ve la otra cara de la moneda a lo que la compañía anunció con bombos y platillos. Tanzania es el vertedero en donde se amontonan miles de millones de residuos plásticos, todos ellos pertenecientes al grupo Coca Cola. Evidenciando no solo la viveza y astucia para engañar, dudando también del contenido de sus bebidas, si no la escasa ética profesional que toda empresa debe tener.

Nadie es ajeno al liderazgo no solo en el sector de bebidas gaseosas sino también de marca que posee Coca Cola a nivel global, siendo increíble como un pequeño recipiente color rojo trata de vendernos “la felicidad”, diciendo mucho sobre su tendencia de estrategia publicitaria engañosa, o que quieran vernos la cara, cual niños, presentando campañas ambientales que, en realidad, mientras sigan llenando sus bolsillos, les importará muy poco.

Este problema es urgente y las consecuencias serán para todos en donde cientos de miles de ecosistemas van despareciendo. Ya queda en nosotros, clientes potenciales, si dejaremos que continúe esta dramática situación.

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