Costeo

Tanto dentro como fuera de una empresa el sistema de costeo debe ser definido, primero por los cambios tanto sociales como tecnológicos que van ocurriendo, como por las exigencias del mundo económico que con llevan a invertir más en mecanismos de todo tipo para tener mejor redituabilidad. Antes llamados costos primarios, el material y la mano de obra eran los únicos que se inventariaban, después surgen los costos directos e indirectos para lo que en el siglo XX se comienza a usar el costo absorbente o total que incluye a costos fijos y variables, pero en 1930 surge el costeo directo o variable.

El costo absorbente asigna los costos de producción al producto e incluye tanto costos fijos como variables; mientras que el costeo directo asigna los costos de manufactura al producto incluyendo únicamente costos variables. Ambos son usados en la actualidad, el directo ayuda a la toma de decisiones y administración dentro de la empresa y el absorbente informa a usuarios externos.

Dentro de las significativas diferencias entre cada uno de los modelos se pueden observar: que el costeo directo considera a los costos fijos como de periodo, su única variable en costos son los inventarios, tiene una perspectiva marginal y su utilidad incremente si el número de unidades vendidas es mayor a las producidas mientras que el método absorbente, en éste se distribuyen los costos entre las unidades que producen, incluyendo en inventarios tanto costos fijos como variables, y clasifica sus costos de acuerdo a importancia, su utilidad incrementa cuanto el volumen de producción es mayor al de ventas.

Al hablar de ventajas del costeo directo se encuentran: la facilidad de planeación mediante el modelo de costo-volumen-utilidad presentándolo en el estado de resultados ayudando en la toma de decisiones, donde también el análisis marginal ayuda a escoger la composición óptima en producción, a decidir sobre reducciones de precios, descuentos, incrementos en ventas y facilita la valuación de inventarios entre otras cosas.

Respecto a la ley de ISR en 1989 se permitió deducir compras sin importar si son insumos nacionales o extranjeros ignorando los niveles de inventarios por lo cual es indistinto el método de costeo.

El comercio exterior y los nuevos tratados están generando que las empresas mexicanas exportadoras no puedan determinar sus precios basándose únicamente en los costos variables por lo cual es necesario tener claro que ambos métodos son necesarios ya que cada uno tiene su objetivo, entendiendo así que el costeo absorbente costea correctamente los productos valuando inventarios ajustándose a las normas y el directo busca facilitar la toma de decisiones dentro de la empresa y formulación de estrategias.

Por lo tanto se tiene claro que la utilidad se relaciona directamente con las ventas sin ésta ser afectada por el nivel de producción

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