CÓMO INCIDE LA POLÍTICA FISCAL EN LA ESTABILIDAD Y CRECIMIENTO DE UN PAÍS?

¿CÓMO INCIDE LA POLÍTICA FISCAL EN LA ESTABILIDAD Y CRECIMIENTO DE UN PAÍS?

Uno de los fines de la política fiscal es generar la estabilidad económica de un país, esto se realiza por medio de unos instrumentos de política fiscal como lo son el gasto público y los impuestos; la utilización de estos instrumentos permitirán atenuar los efectos de las oscilaciones de los ciclos económicos, esto con el fin de evitar la inflación y llegar a un punto de pleno empleo. A continuación se analizará la relación existente entre los instrumentos y las políticas utilizadas que son planteadas para el crecimiento de la economía.

La política fiscal le da especial importancia a la incidencia que tienen los impuestos y el gasto público en la correcta asignación de los recursos. Los instrumentos de política fiscal normalmente están clasificados en tres categorías: Tributación, Gasto Público y Saldo Presupuestario Agregado.

Los instrumentos y las políticas utilizadas en relación a las finanzas públicas y al crecimiento de la economía permiten analizar la política fiscal como el medio de soporte de tres grandes esferas: la asignación, estabilidad y distribución de los diferentes recursos y del ingreso; por ello las acciones de la política fiscal pueden afectar el objetivo de control de la inflación y del crecimiento económico.

La política económica es esencial para lograr el crecimiento a largo plazo y depende del buen manejo de los Instrumentos de la Política Fiscal; a través del manejo de los impuestos de tarifas, bases gravables, exenciones; también mediante los precios administrados por el Estado en impuestos a la gasolina, tarifas servicios, cotizaciones a la SS, etc. y mediante la decisión del gasto público en diversos programas como la educación, salud, pensiones, justicia, seguridad y defensa, infraestructura, etc.; pueden provocar un aumento en la deuda pública la cual termina afectando el mercado de capitales y la macroeconomía.

El crecimiento económico de un país a largo plazo se enfoca en tres factores determinantes: Los conocimientos técnicos implementados en el país en proporción a la eficiencia con que se utilicen los recursos existentes y en relación a aspectos como el cultural, político y económico; la acumulación que se puede obtener de los recursos productivos para afrontar situaciones futuras y el progreso tecnológico que le permite competir ante la globalización de las exigencias de consumido diarias.

La política tributaria, la política de gasto y la política presupuestaria podrían afectar el crecimiento económico; debido a una mala concentración de política fiscal dada la asignación, distribución y estabilización de los diferentes recursos. Cuando el Gobierno está en déficit la primera medida que se asume es elevar los impuestos tributarios, lo que a su vez genera un recorte en los ingresos disponibles tanto de las empresas como de las familias y reduce la capacidad de inversión del sector privado originando un incremento en las tasas de desempleo. De esta manera el Estado intentado mejorar el recaudo tributario por medio de los controles a la evasión y a la elusión efectuados por la DIAN,

Una reducción en la inversión privada traería graves problemas para el país, una disminución en el ritmo de crecimiento que no permitiría mejorar los niveles de desempleo. Existen otros efectos de la reducción de la inversión privada como: el incremento de las tasas de interés, contracción del gasto público, disminución de la inversión privada y pública y mayor desigualdad distributiva del ingreso.

El déficit fiscal y el déficit en la cuenta corriente de la balanza de pagos son considerados en la teoría macroeconómica como déficit gemelos, por la gran relación e incidencia que existe entre ellos. La principal vía por la cual se produce esta relación es la reevaluación de la tasa de cambio como respuesta a un mayor déficit fiscal.

Las teorías del crecimiento económico frente a la acumulación de recursos como lo expreso Schumpeter (1934) y Tanzi (1995) al resaltar la importancia de la capacidad de absorción social de un país con respecto a la tecnología para lograr un mejor desarrollo. La acumulación de recursos y el aumento de la productividad y las medidas de política económica estimulan el producto pero a su vez pueden reducir el bienestar social; como se puede observar en los incentivos fiscales excesivos que reciben algunas industrias sin tener en cuenta adecuadamente los posibles costos de la contaminación proveniente de las actividades que éstas realizan.

El fuerte desarrollo económico entre 1950 y 1975 dio un gran cambio pero no a fondo en la distribución de los ingresos, en 1990 Colombia conservaba la regresiva y poca equidad de la distribución de los recursos donde un porcentaje mayor de la población recibía más altos ingresos mientras los más bajos ingresos sólo alcanzan a tener un 4%.

Así, el crecimiento económico fue reduciendo sólo lentamente la pobreza, que en 1970 afectaba a la mitad de la población, siendo mayor en el campo que en las zonas urbanas. Ahora bien, el manejo de la crisis durante los años ochenta impidió que en Colombia tuviera lugar un empobrecimiento fuerte de la población, si bien la actual estrategia de apertura hace pensar que el ajuste reducirá los ingresos de los más pobres, como es la experiencia en toda América Latina.

Las reformas adoptadas durante la primera mitad de los noventa buscaron mejorar el bienestar de los colombianos en atribución a la población más vulnerable elevando la tasa de crecimiento de largo plazo y mejorando la distribución del ingreso mediante iniciativas de gasto en servicios públicos básicos para la población. El mayor crecimiento se observó en los primeros años de su aplicación, pero la segunda mitad de la década estuvo marcada por una desaceleración del ritmo de actividad económica y un empeoramiento de los indicadores de pobreza y distribución del ingreso.

Este documento del Fondo Monetario Internacional, argumenta que la poca efectividad fiscal, los repetidos choques externos y el agravamiento del conflicto son los principales causantes de esta desaceleración del crecimiento; desde 1996 la economía colombiana exhibe un nuevo ciclo un poco más corto donde las reformas constitucionales y legales al Banco de la República se crean con el fin de enfrentar las diferentes circunstancias que no permiten una concentración del ajuste fiscal y las reformas estructurales; es decir jugaba con mayor importancia un papel más activo el emisor frente al ciclo de corto plazo y la continuación de la Red de Apoyo Social para la población vulnerable, con un disparador automático que la active inmediatamente la economía entre en

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