EL ESTADO DE SITUACIÓN DE LA EMPRESA COMO FUENTE DE CONTENIDO

EL ESTADO DE SITUACIÓN DE LA EMPRESA COMO FUENTE DE CONTENIDO

Solemos decir que es esencial conocer el estado de la marca para comenzar a pensar la estrategia comunicativa. Pero, más allá de partir desde ahí, nos brinda herramientas para el día a día.

Siempre recomiendo hacer un análisis FODA lo más completo posible. Este se compone de F (Fortalezas), O (Oportunidades), D (Debilidades) y A (Amenazas), y permite conocer la competencia, el mercado y qué sucede en la empresa. Es un corte horizontal en la corteza del árbol para entender cómo se suscitan los hechos en la actualidad y qué pasos debemos seguir, si queremos volver a crecer y posicionarnos. Es un análisis quirúrgico, detallado, despiadado y realista. Sin anestesia, para saber exactamente dónde estamos.

Nos da el contenido necesario y la voz que necesitamos en nuestro ecosistema digital ¿Por qué? Porque permite diferenciarnos. Si conocemos el corazón de la marca, podemos hablar con su personalidad. Desde ese lugar, lograremos saber qué falta en el rubro, qué hueco existe, y, fundamentalmente, QUÉ BUSCA EL CLIENTE.

En la actualidad, las escuelas comunicativas vuelven al receptor. Así, como en los 60 llegó “la hora del lector” en la literatura, en los mass media le damos la bienvenida a la experiencia de usuario. Es decir, volver el contenido y el recorrido del cliente lo más ameno posible. ¿De qué me sirve saber dónde estamos parados? Me sirve para saber qué nos falta, qué potencialidades existen y qué debemos mejorar.

La voz y el tono serán claves en ese momento, porque le dirán al user “Sabemos en qué fallamos y qué necesitas”. Por eso, el secreto es pararnos del otro lado: del usuario, volver a ser compradores y pensar cómo nos gustaría que nos hablen y cómo nos gustaría comprar.

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