El arte de empezar.

        El arte de empezar

Generalmente a todo emprendedor que desea realizar una tarea que hará del mundo un lugar mejor, le llega el momento en que en su inspiración concibe la maravillosa idea de negocio que tanto buscaba. Sin embargo al momento de pasar a hechos, la gran mayoría desconoce como y por donde empezar. Hay quienes se ven abrumados por la inmensa cantidad de información que existe, ya sea en artículos, libros o en internet, acerca de como crear un plan de negocios, realizar todos los procedimientos necesarios como buscar financiamiento o crear una marca personal. Otros empiezan errando en sus prioridades lo que los lleva a la bancarrota incluso antes de descubrir que errores cometió o solicitar la ayuda de un profesional en la materia. En ambas situaciones  se olvidan que la esencia para realizar y dirigir una empresa no es “aprender a hacer”, sino “hacer”.

Es por ello que en este libro se solidifica la experiencia profesional de veinte años de uno de peritos más originales y relevantes de la actualidad,  pues es un guía  absoluto para gente emprendedora con visión, precisión y motivación inspiradas en su proyecto y que no desean desperdiciar su tiempo estudiando teorías irrelevantes. Según el autor en este arte de empezar existe cinco cuestiones necesarias que todo emprendedor deberá realizar.

La primera labor se trata de establecer como se obtener un sentido a través del nuevo servicio o producto y basar sobre el la empresa que se desea crear. El sentido fluye en el momento en que el producto es capaz de enriquecer la calidad de vida de las personas que se sirvan de ello y también al mundo. En lugar de una rebuscada misión de difícil recordatorio, resulta mejor centra el sentido de una empresa en una mantra, es decir en un sacramento que sirva de apoyo a la meditación. Al momento de realizar la practica se trata de formulas verbales reducidas que releve la razón de ser de una empresa.

Tiene mas efectividad empezar con la creación del servicio o producto que revelen un plan de negocios o desarrollar una proyección financiera.  Esto quiere decir que se debe construir n modelo, crear un software o una pagina web. La determinación de poner en marcha un propósito o proyecto debe considerar tres principios; proyectar de forma amplia y sin restricciones, hallar un grupo de personas relacionadas y clasificar al público entre leales y antipáticos.

Independientemente de la naturaleza de la empresa que se desea formar, se debe corroborar que esta tenga rentabilidad y para esto es necesario tener un prototipo o modelo de negocio sostenible. Con esta finalidad se definen las características del cliente y así conocer sus necesidades para posteriormente crear un método de venta que garantice que los ingresos sean superiores que los costos. Un modelo efectivo de negocio debe ser determinado y capaz de poder ser descrito con facilidad y sencillez, como máximo en diez palabras de uso cotidiano.

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