El arte de la guerra y los negocios

El presente ensayo se enfocara en identificar en el Libro El Arte de la Guerra, distintas características y acciones, que son aplicables en el campo de los negocios y la empresa, particularmente en el sector inmobiliario. Ya que Sun Tzu plantea diversas estrategias para vencer a la competencia, en las que no es necesario la lucha frente a frente, sino que como en el sector inmobiliario, los resultados positivos son consecuencia de lo que rival no puede ver, de esas decisiones que toma la empresa interiormente en todos sus niveles y que las hace tener éxito sobre su competencia en el mercado en el que se desenvuelven, mediante acciones de “batalla” en las que no es necesario si quiera confrontar a la competencia.

        Sin embargo, la premisa central que ha llevado a este desarrollo, es la Evaluación. Ya que como en el sector inmobiliario se requiere evaluar a la competencia, evaluar el mercado, pero principalmente hacer una autoevaluación de la propia empresa, para así poder tomar las mejores decisiones que le den distintos beneficios a todos los niveles de la empresa.

Por lo que también se plantean las diversas características con las que debe contar en sus diferentes niveles, para que logre tener éxito venciendo a los rivales, comenzando por el líder, quien está a cargo de las decisiones importantes y de dirigir con sabiduría a sus trabajadores, y también enfatizando en las características de la fuerza de trabajo o “soldados”, como lo denomina Tzu, quienes son los que trabajarán por los objetivos planteados.

A su vez a lo largo del desarrollo se considerarán en un contexto inmobiliario las 5 características principales para vencer descritas por Tzu, la Doctrina, que es la confianza y buena relación de los trabajadores con su jefe, que a su vez es resultado del Mando, un jefe o jefes de buenas cualidades; el Tiempo, que es el identificar los momentos cuando hay que decidir y tomar acciones; el Terreno, traduciéndose al mercado; y la Disciplina, que es la forma en que se incentiva y se mantiene a la fuerza laboral enfocada en los mismo objetivos. (1)

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El Líder

Debe guiar a su ejército a adaptarse a las condiciones para lograr objetivos, sabiendo aprovechar el ímpetu de tu fuerza para sacarles el máximo provecho. En el sector inmobiliario el líder o jefe debe analizar el costo- beneficio, o en su defecto el daño que podría acarrear las acciones que tome. Por lo que un buen jefe debe tener amplio compromiso con los objetivos, que el mismo debe trazar de una manera racional y realista basada en su amplia experiencia, para poder identificar las buenas oportunidades y actuar rápidamente para vencer a la competencia dañándolos de cierto modo, mediante acciones estratégicas motivadas por el beneficio.

En su actuar nunca debe dejarse llevar por sus propias emociones ya que suelen confundir su juicio al momento de decidir, por tal motivo debe estudiar ampliamente sus decisiones para que sean las mejores posibles, para así poder decidir cuándo, cómo y contra quien le es ventajoso actuar en el mercado. Por ejemplo, decidir si un terreno es el adecuado para implementar un nuevo concepto inmobiliario, o si puede ser rentable desafiar o competir contra una empresa por el mismo sector del mercado.

Tzu nos dice que el líder debe comunicarse con “órdenes razonables, justas, sencillas, claras y consecuentes…”(1), porque así el líder de una empresa inmobiliaria de gran tamaño, estar dotado de autoridad y tomar las decisiones importantes, puede compartir sus intenciones a todas sus gerencias en diferentes ciudades o sus distintas divisiones, para que cooperen en el cumplimiento de los mismo objetivos.

El Ejército

Otra Labor importante de un líder “…consiste en desarrollar un ejército fuerte, un pueblo próspero, una sociedad armoniosa y una manera ordenada de vivir.”(2) por lo que el ejército de una empresa, siendo su fuerza de laboral, debe ser organizada en una división en grupos o sectores, de vendedores, arquitectos, administrativos, etc. en diferentes ciudades, o diferentes divisiones del sector inmobiliario, como vivienda, comercial, industrial, etc. pero que a pesar de esta división estén unidos en el mismo objetivo para que no exista confusión y desorden.

Sin embargo debe cuidar de su ejército y desarrollar en el ciertas características para asegurar la victoria sobre su competencia. Por lo que es importante que el Líder conozca a su fuerza y siempre asegure ese ambiente de motivación, que genere una fuerza de ímpetu en sus trabajadores, para que estos puedan desarrollar sus capacidades al máximo; y el conocimiento de éstas capacidades, como nos dice Tzu, le darán la confianza al Líder para encomendar deberes y responsabilidades adecuadas y trazar estrategias de acuerdo a sus habilidades.

El cuidar de las tropas en una empresa, se refiere a evitar su cansancio y la perdida de energía o esa fuerza de ímpetu y asegurar el aumentar su fuerza. Por el contrario, si desconoces y haces caso omiso de estas características debido a que no todos tienen el mismo rendimiento, y les exiges o explotas de más, por alcanzar un objetivo, mediante un proyecto ambicioso, para

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dominar el mercado, mediante un desarrollo inmobiliario de gran escala, para el que tus trabajadores o determinada división no está preparado, y decides invertir mucho tiempo y recursos, y tratas de innovar mediante rápidas acciones, al final se sufrirá un fracaso, acompañado de pérdidas económicas y de poder, además de que no estarás preparado para hacer frente a una reacción u oferta más fresca y fuerte de tu competencia. Por lo que es mejor avanzar despacio en la búsqueda de la victoria, ya que como Tzu nos dice; “…lo más importante en una operación militar es la victoria y no la persistencia.” (1)

        Por lo que si la exigencia y el trato a sus trabajadores es adecuado, habrá una buena relación de aprecio y confianza, y estarán dispuestos a seguirte en las decisiones que tomes. Sin embargo, en el libro de “El Arte de la Guerra”, se sugiere que estas conductas no deben dar paso a que se relaje u omita la disciplina y se sea indulgente, ya que los trabajadores se pueden llegar a convertir en “niños mimados” y esta conducta mermara en su desempeño y resultados. Por lo que como nos dice Tzu, es indispensable de un castigo, para asegurar su lealtad y eficiencia. En el sector inmobiliario y empresarial esto se da mediante llamadas de atención a todo el personal mediante penalizaciones o despido de personal.

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