En Busca Del Crecimiento

En busca del crecimiento

Europa del Este espera que la industria la saque a flote.

THE ECONOMIST INTELLIGENCE UNIT

Hace poco, los titulares hacían referencia a algunas cifras a la baja de Francia y Alemania, que al igual que el resto de la eurozona sufrieron un estancamiento de sus economías en los tres meses que concluyeron en junio. Predeciblemente, esto tuvo un efecto dominó en Europa central cuyo crecimiento sigue dependiendo de sus exportaciones a la Unión Europea. Hungría registró una caída de su crecimiento a solo 1.5% anual; el crecimiento de los checos fue de 2.4% y el de Rumania, 1.4%. Eslovaquia tuvo un crecimiento de 3.3%, debido a la expansión de la producción de automotrices como Volkswagen y Peugeot en el país. Pero aun esta cifra mostró una desaceleración con respecto al 3.5% de crecimiento del trimestre anterior, lo cual sugiere que la recuperación del país está comenzando a perder fuerza.

Los niveles de deuda en naciones como Irlanda y Grecia, la amenaza creciente de que la crisis se expanda a países grandes como Italia y España, están aumentando los temores de que Europa pudiera entrar en una nueva recesión.

La proyección de crecimiento de la eurozona pasó de 2 a 1.7% para este año, y apenas a 1% para 2012. Estas serían malas noticias para los países de Europa central que dependen de la recuperación de la zona del euro para su propio crecimiento. No se ha proporcionado un desglose de las cifras del segundo trimestre, pero hay signos de que la desaceleración en el crecimiento de la región se debe a los mercados de exportación con crecimiento plano.

Hungría, por ejemplo, tuvo un crecimiento en su producción de apenas 1% en junio, luego de no crecer en mayo. Hasta abril., la producción habría estado creciendo aproximadamente 10%. El área del euro absorbe alrededor de 60% de todos los productos que se fabrican en el país, que depende de un conjunto de plantas extranjeras de ensamblado. También parece que la industria se está desacelerando en países como la República Checa.

Pero a decir verdad, la situación de las exportaciones está lejos de ser desesperante. La contracara de una demanda más débil por parte de la Union Europea es que la recesión ha llevado a las multinacionales a trasladar la mayor parte de su producción a las plantas de Europa central, y a voltear su mirada hacia los mercados emergentes en busca de crecimiento a causa del estancamiento de la demanda en el mundo desarrollado.

Por ejemplo, Audi está invirtiendo 1,000 millones de dólares en su planta de motores de Hungría, al mismo tiempo que está trasladando su producción fuera de Occidente, mientras que Skoda, propiedad de Volkswagen en la República Checa, tiene planes de duplicar su producción en el país como consecuencia del incremento de sus ventas en China y otros países (Renault tiene planes similares para su subsidiaria rumana,

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