Finanzas personales: Cuatro principios para invertir bien

Fecha: 24/06/2015

Curso: 124

Ensayo:

Finanzas personales: Cuatro principios para invertir bien

        Finanzas personales: cuatro principios para invertir bien, escrito por Juan Palacios Raufast, a mi parecer, más que un libro es una guía para, como su título indica, saber invertir. Antes de comenzar hay que conocer que las finanzas es una rama de la economía que trata el tema relacionado con la obtención y gestión del dinero, recursos o capital por parte de una persona o empresa^[1]. Por lo tanto, cualquier persona que en algún momento de su vida haya administrado dinero se puede considerar que ha aplicado las finanzas. Acorde a mi criterio, el objetivo de este libro es enseñarnos a invertir, a conocer los riesgos que pueden tener los diferentes tipos de inversiones, las cosas que pueden suceder al momento de realizar diversas transacciones, aprender a diferenciar entre un inversor y un especulador y en especial en la gestión del patrimonio. Al comenzar el capítulo uno nos daremos cuenta en cuál de los tres grupos de personas nos encontramos, lo que llamó mi atención de esto fue que solo un poco de personas se encuentra en el último grupo, el grupo de personas que saben manejar correctamente sus finanzas y logran sobresalir. Además comprendí que el hecho de no tener  una adecuada educación financiera no es el único factor que afecta las finanzas personales, se pueden encontrar otros factores como por ejemplo el tipo de empleo que se tiene, de donde provenimos, el sueldo que se obtiene, entre otros.

        Para empezar tendremos que conocer que no siempre la mejor opción es apostar a lo grande para tener grandes beneficios, si no, tratar de no cometer errores. De este modo evitaremos ser especuladores y empezaremos a ser inversores. La mejor manera para tratar de evitar los errores es conocer en qué estamos invirtiendo y en qué parte del mundo, es decir si queremos hacer una inversión bastante arriesgada se debería hacer en un país donde haya la suficiente libertad para invertir, más no en un país donde el sistema financiero la haga exclusivamente el Estado. Para conocer mejor la diferencia entre un inversor y un especulador se hace referencia a Keynes, “Invertir es tratar de predecir la rentabilidad de un activo. Especular es intentar anticipar la psicología del mercado”. Como se ha mencionado antes, no siempre es mejor apostar a lo grande, porque mientras más rentable sea una inversión, más riesgosa es, debido a esto, los especuladores pierden dinero en comparación con los inversores, los segundos realizan inversiones estables, los primeros “se la juegan”. Gracias a Juan Palacios Raufast podemos determinar si tenemos una visión de especulador o de inversor, donde el especulador no tiene objetivos, solo busca un beneficio mayor sin tener en mente las consecuencias. Aprendemos también que no solo hay factores internos que nos pueda hacer ver como especulador, asimismo hay factores externos que nos incitan a pensar como un especulador, como el análisis técnico. El análisis técnico, similar a especular, no es totalmente confiable pero por alguna razón tiende a suceder. Es importante conocer además de las diferencias entre especulador e inversor, los tipos de inversores que hay, nos encontramos con dos tipos, inversor activo e inversor pasivo, el primer tipo de inversor se enfoca en el valor de la inversión y trabaja con plazos largos. El segundo no hace apuestas contra el mercado, es decir, intenta mantenerse al margen en el mercado global, apostando por los precios ya establecidos. El inversor pasivo tiene mayor rentabilidad que el inversor activo, debido a que los inversores activos realizan más gastos, ya sea por asesoramientos, gestiones, comisiones, etc. Una vez conocido todo esto, podremos empezar con los cuatro principios para invertir bien, que es una simplificación de la inversión pasiva. Para facilitar la comprensión del primer principio se cita lo siguiente: “No pongas todos tus huevos en la misma canasta” (Warren Buffett)^[2], esto se refiere a que si se va a invertir, no hay que hacerlo todo en un mismo negocio, si no en varios, ya que así se estaría reduciendo el riesgo y se estaría diversificando. El segundo principio trata sobre controlar los gastos, tratar de minimizarlos lo más posible. El tercero es diseñar un plan y fijar un objetivo, teniendo en cuenta las limitaciones. Finalmente el cuarto principio, poner en contexto, se entendió mejor con el ejemplo de un plan de inversión  que está bien fundamentado, si convence vamos a invertir, si no estamos totalmente seguros es mejor “jugar a la segura”.

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