LA MISIÓN Y LOS VALORES DE LA EMPRESA

MAGÍSTER EN DIRECCIÓN Y GESTIÓN DE EMPRESAS-MBA

ASIGNATURA: DIRECCIÓN ESTRATÉGICA I

CAPÍTULO III: LA MISIÓN Y LOS VALORES DE LA EMPRESA

ÍNDICE

1. La misión de la empresa        3

    1.1. Concepto de misión        3

    1.2. Identificación de la misión        3

2. La visión y el propósito estratégico        4

    2.1. Concepto e identificación de la visión        4

    2.2. Concepto e identificación del propósito estratégico        4

3. La responsabilidad social        6

    3.1. Ámbito de la responsabilidad social        6

    3.2. Formas de participación de los trabajadores en la empresa        6

4. Concepto de ética de los negocios y justificación de su estudio        7

5. Conclusión        8

LA MISIÓN Y LOS VALORES DE LA EMPRESA

1. LA MISIÓN DE LA EMPRESA

1.1. Concepto de misión

La misión representa la identidad y personalidad de la empresa, recogiendo la razón de ser de la empresa y la justificación de su existencia. La misión responde a la pregunta “¿Cuál es la esencia de nuestro negocio y cuál queremos que sea?”. Según Campbell y Tawadey (1992) para que la misión sea efectiva se deben seguir las siguientes normas:

• Dedicar años, ya que es un proyecto a largo plazo.
• La Dirección debe llegar a un consenso antes de empezar a trabajar. Luego debe comprometerse con sus acciones a mostrar que la declaración que se formula es verdadera.
• Continuidad en la dirección de la misión.
• La declaración debe reflejar la personalidad de la empresa.
• La estrategia y los valores que incluya la misión deben formularse juntos.
• La Dirección debe concentrarse en el enlace entre comportamiento y valores.

La misión suele ser estable en el tiempo, pero puede ser replanteada como consecuencia de los cambios del entorno.

1.2. Identificación de la misión

La misión es específica para cada empresa y determina su individualidad, además es necesario señalar que ésta no debería estar relacionada con la rentabilidad, ya que son condiciones necesarias y generales para todas las empresas. Según Hax y Majluf (1997) la misión suele crearse a partir de las siguientes variables:

• La definición del campo de actividad de la empresa (negocios, productos y servicios ofrecidos, mercados atendidos o ámbito geográfico cubierto).
• La identificación de las capacidades esenciales que la empresa ha desarrollado o puede desarrollar. De tal forma de poner en manifiesto la forma de competir en los mercados.

Una misión amplia permite una gran discrecionalidad en el futuro desarrollo empresarial, pero puede generar desorientación en la identificación de lo que es esencial en la empresa. Por otro lado una misión muy acotada puede limitar las posibilidades de desarrollo, pero ayuda a centrar los esfuerzos de la organización para la consecución de sus objetivos. En las empresas diversificadas es recomendable encontrar un hilo conductor que de sentido al conjunto de la empresa, en el caso que sea imposible definir una razón que integre todos los negocios, será necesario establecer misiones para cada negocio o unidades de negocio.

1. LA VISIÓN Y EL PROPÓSITO ESTRATÉGICO

2.1. Concepto e identificación de la visión

La visión hace referencia a la percepción actual de lo que será o debería ser la empresa en el futuro, responde a las preguntas ¿Cómo seremos, cómo deberíamos ser? La visión marca la pauta que deben seguir los individuos cuando se les presente diversas alternativas sobre cómo realizar las tareas. La identificación de la visión necesita creatividad, el instinto y el sentido creativo de la Dirección, pero no debe ser el resultado de una iluminación o representación idílica.

2.2. Concepto e identificación del propósito estratégico

Consiste en la idea de objetivos y resultados a conseguir por parte de la empresa en el largo plazo, responde a las preguntas de ¿Qué queremos ser y adonde queremos llegar? Su importancia surge de la necesidad de que la misión y la visión se traduzcan en indicadores específicos a alcanzar, marcando la dirección correcta de la empresa. Para Hamel y Prahalad (1990) el propósito estratégico reúne tres características esenciales:

• Incorpora la idea de triunfo: Términos ambiciosos y con vista hacia el futuro deseado.
• Es estable a lo largo del tiempo: proporciona coherencia en las decisiones tanto estratégicas como a corto plazo.
• Ha de merecer el esfuerzo y el compromiso del personal en su consecución: debe ser un reto del conjunto de la organización, consiguiendo el compromiso y la motivación necesaria del personal de la empresa.

El propósito estratégico dependerá del tipo de empresa y de su ambición, por lo que su formulación puede ser adecuada en función de las características de cada empresa. El desfase existente entre el futuro deseado por el propósito estratégico y la realidad actual puede ser enorme, por lo que la organización debe desagregar ese objetivo genérico en objetivos parciales, intermedios y menos ambiciosos, que algunos autores han denominado “retos empresariales” (Hamel y Prahalad, 1990). Para que un reto empresarial sea efectivo:

• Debe crear una sensación de urgencia o crisis para forzar a la empresa a mejorar.
• Debe desarrollar un espíritu competitivo.
• Debe proporcionar a los empleados la formación necesaria para cumplir los retos.
• Debe dar a la organización tiempo para dirigir un reto antes de lanzar otro.
• Debe establecer hitos claros y revisar los mecanismos para hacer el seguimiento del progreso.

La identificación de estos retos empresariales plantea varios problemas relevantes:

• Según tipo de objetivos: conseguir el equilibrio necesario entre los objetivos básicos de la empresa (rentabilidad y creación de valor) y los objetivos relacionados con el propósito estratégico, referidos al éxito competitivo.
• Según el horizonte temporal: preferencia entre objetivos a corto plazo y objetivos de largo plazo.
• Según grado de concreción: se pueden plantear objetivos abiertos o cerrados.
• Según nivel de implantación: se debe definir los objetivos de la empresa, referidos a la organización en su conjunto.

1. LA RESPONSABILIDAD SOCIAL DE LA EMPRESA

Hace referencia a la actitud de la empresa ante las demandas de tipo social planteadas por el conjunto de la sociedad como consecuencia de sus actividades, a la evaluación y compensación de los costes asociales que la misma genera y a la ampliación del campo de sus objetivos definiendo el rol social que debe desarrollar. Con ello, la empresa conseguirá la legitimidad y responsabilidad ante los diversos grupos de poder.

...