Los productos de la compañía Savoy

En Venezuela, los amantes del chocolate parecieran inclinarse por las marcas de tradición. Y en ese sentido el rey, con todo y corona, ha sido Savoy, que con sus 69 años de trayectoria prácticamente se ha hecho dueño y señor de la categoría.

Cuando Nestlé compró el portafolio de dulces de Savoy en 1988 ya la marca era líder en el segmento chocolates y confitería. Hoy día, bajo el amparo de la transnacional, el crecimiento del negocio ha sido avasallante.

Uno de los productos más tradicionales es Chocolate de Leche Savoy, que se ubica como líder del formato barras de chocolates, con calificaciones positivas en distintos indicadores como participación de mercado reconocimiento y lealtad de marca. De acuerdo con Ramón Chávez Rosas, director de comunicaciones de Nestlé Venezuela, este producto “está afianzado en la mente del consumidor como el chocolate venezolano por excelencia”. De hecho, a nivel de branding —según Chávez— la marca ha sido tan poderosa que sólo ha necesitado refrescamientos de logo y empaque.

Nestlé reconoce que la fortaleza de este producto radica en que está hecho con cacao venezolano y es eso, precisamente, un atributo diferenciador. Además, refiere el vocero de la empresa, que recientemente se realizó una extensión de línea con excelente aceptación, en la que el chocolate con leche se cubre de avellanas.

El segundo chocolate más recordado por los venezolanos fue Cri-Cri, también de Savoy, el cual se diferencia de Chocolate de Leche por la inclusión de trocitos de arroz inflado cuyo “crunch” se ha convertido en el principal atributo funcional y excusa por excelencia a la hora de comunicar y promover.

Una de sus campañas más recientes ha sido “Cruje sin Límites”, una promoción en la que se presenta al producto como elemento que permite superar los retos gracias a su efecto crujiente. “Este selling invita a los jóvenes de 12 a 17 años a seguir adelante (…) vencer esa limitación mental o impuesta por su entorno y lograr salir con la chica que te gusta o tocar el instrumento que deseas”, dice Chávez.

La campaña “Cruje sin Límites” ha contado con comerciales de televisión y menciones en vivo, además de avisos impresos en revistas como Urbe, Magazine, Rebelde y TÚ, a los que se sumaron las vallas, kioscos y edificios rotulados. Además, se hizo una incursión en Messenger, plataforma donde lanzaron una serie de aplicaciones ilustradas con la marca. A nivel de empaque, Cri Cri ha vivido diversos refrescamientos sin dejar de lado el amarillo, su color característico, y el apoyo gráfico “Savoy Cri Cri” en rojo. No obstante, el año pasado, durante la temporada de béisbol, la marca lanzó una edición limitada que vestía al producto con uniforme deportivo, así que el empaque mostró el look y tipografía característicos de la pelota.

El deporte resulta un buen aliado a la hora de promocionar chocolates

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