RESPONSABILIDAD EMPRESARIAL (un enfoque de derecho corporativo).

RESPONSABILIDAD EMPRESARIAL.

Un enfoque de derecho corporativo

Ya sea que se trate de una pequeña, mediana o gran empresa, el tema de responsabilidad  es de suma importancia para el tratamiento de cada uno de los aspectos que conlleva el manejar un ente legal y económico de este tipo y a cada actor en este escenario. Hablamos de la responsabilidad que existe entre cada uno de los elementos de la organización de manera interna, para distinguirla de la  responsabilidad  social, donde la empresa muestra su disposición a mejorar el entorno y tener una óptima relación con el público.

Cada uno de los niveles de la empresa debe mostrar un fuerte compromiso con este tema. Cuando se relaja o se minimiza la importancia de ella, nos encontramos, en la mayoría de los casos, con malos manejos, fraudes, especulaciones o fugas de información (espionaje industrial), robos (en cualquier escala) y peculado, si se trata de una entidad pública.

LA SOCIEDAD.

Las empresas, en este 2017, comprenden (o deberían de hacerlo), que sus actividades son “monitoreadas” por varias entidades, que velan porque se conduzcan de la mejor manera ética posible para no ver afectados los intereses, salud, economía y bienestar de la sociedad y que el intercambio comercial sea equitativo para ambas partes. De esta manera la sociedad se convierte en un factor de control para las empresas que se encuentran en su ámbito, tomando muy en cuenta que, después de todo, las empresas dependen del favor y preferencia de la sociedad, y con esto, su existencia o extinción.

ADMINISTRADORES.

Al interior de las empresas, el trabajo de los administradores es más que importante. Su disposición al trabajo, la gran cantidad de variantes que debe saber controlar, el manejo de las relaciones al interior y exterior de la empresa, su dinamismo y talentos deben ser regidos siempre por el mayor sentido de responsabilidad, al grado que podemos decir que un administrador que tenga todos los atributos de formación profesional pero pone en segundo término la responsabilidad que emana de sus acciones, pone en riesgo su permanencia en la empresa, si no es que a la misma entidad.

SOCIOS.

La mayoría de las empresas de mediano y gran tamaño, deben la formación de su capital a dos o más socios. De ellos depende que la circulación de efectivo (netamente en términos monetarios) sea sana en las empresas. Ante la circunstancia de que ellos recibirán utilidades si la empresa tiene la capacidad de generarlas y absorberán las pérdidas si se da el caso. Sin embargo muchas decisiones para llegar a una u otra situación (ganancia o pérdida) se deberá a la directriz que marquen a sus administradores, si es que estos socios son parte del aparato que debe decidir el rumbo a seguir de la empresa. Estas decisiones deben tomarse con el denominador común de la responsabilidad, por el obvio afán de lograr el mayor lucro si afectar a cada uno de los componentes al interior y a la clientela para la cual dirigen sus esfuerzos.

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