Reflexión retribuciones caso práctico EUDE

Cuando, como trabajadores, reflexionamos acerca de que hace que queramos permanecer en la empresa de la que formamos parte surgen varios motivos que hacen que pensemos que merece la pena. Pero, ¿Cuál es el motivo que prevalece sobre los demás, tienen todos ellos el mismo peso, o es la combinación de estos lo que hace que no tengamos el sentimiento de querer cambiar de empleo?

A raíz del articulo propuesto cabe hacer una reflexión acerca de qué o cuáles son los motivos que hacen que queramos pertenecer en una organización. Comenzando por el título del artículo, “La permanencia de las organizaciones depende más del desarrollo que de la remuneración”, es evidente que el crecimiento y desarrollo profesional es un factor importante a la hora de permanecer en una empresa, pues no todas ofrecen una formación constante o una plena confianza en sus trabajadores para que desarrollen sus tareas de forma autónoma, creando así un buen ambiente de trabajo.

En segundo lugar, aparece el equilibrio entre la vida profesional y personal de los trabajadores, otro motivo de gran importancia para cualquier trabajador, puesto que, sentir que estás descuidando tu entorno familiar en detrimento de tu empleo es frustrante. Que exista un equilibrio laboral y personal es muy importante para que un trabajador se sienta cómodo ya que no debemos olvidar que trabajar no es lo más importante para vivir sino una herramienta para poder hacer que una persona y su entorno familiar lo hagan de la mejor de las maneras posibles. Por esto, este motivo es crucial, ya que no hay que olvidar que las personas trabajan para obtener unas mejores condiciones para vivir y, por el contrario, no entra en los planes de nadie vivir para trabajar. En el momento en que una organización descuide esta premisa, estará equivocándose al 100%.

En tercer lugar, aparece la retribución seguida de otros motivos. Algunos pueden pensar que teniendo un buen ambiente de trabajo donde se fomenta el desarrollo profesional y que, además, exista un equilibrio entre vida laboral y familiar es la base, siendo la retribución algo más secundario.

En mi opinión, la importancia de estos motivos es complementaria y reversible, es decir, todos son importantes, pero invertiría las posiciones de estos. Sin una retribución justa con el desempeño del trabajador, los otros motivos no serían contemplados, ya que como indiqué antes, trabajamos para vivir y no vivimos para trabajar.

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