Teorias de la empresa.TEORIA DE LA AGENCIA

2: TEORIAS DE LA EMPRESA

INTRODUCCION

Una teoría, es un instrumento para explicar algo, que debe reunir una serie de características como son: una lógica interna, debe ser completa, contrastarse con la realidad y ser versátil.

Así, una teoría de la empresa, se define como el conjunto sistemático de reglas, leyes y principios que intentan explicar su funcionamiento.

TEORIA NEOCLASICA DE LA EMPRESA

En dicha teoría, propuesta por Adam Smith, se habla del comportamiento humano perfectamente racional, caracterizado por 3 atributos: racionalidad absoluta en sus decisiones, maximizador de sus beneficios, y egoísta en su comportamiento, valorando las alternativas mediante la información proveniente de los mercados transparentes perfectamente competitivos.

Según esta teoría, el mercado es el mecanismo de coordinación económica por excelencia (la mano invisible), que gracias a los precios y a la competencia se conduce al sistema económico a una situación de equilibrio, y cualquier desequilibrio es corregido automáticamente, mediante el libre comercio de la oferta y la demanda.

La empresa, se define como una unidad de producción elemental, maximizadora del beneficio, que ejerce de demandante de factores productivos, y de oferente de bienes y servicios.

Internamente, la empresa se define como una función de producción:

El empresario (propietario de la empresa), es el que decide, al estar dotado de una racionalidad absoluta.

El conjunto de alternativas de producción, se representa mediante una función de producción de la empresa que recoge la cantidad máxima de producto que se puede obtener, a partir de una combinación determinada de factores productivos, mediante una tecnología.

La función del empresario se limita a resolver un problema matemático, que consiste en elegir aquel punto de la función de producción que permita obtener el máximo beneficio, adaptándose a las variaciones del mercado o externalidades.

Externamente, es el sistema de precios el que une la relación entre la empresa y el mercado (entorno). Bajo la competencia perfecta, los precios representativos de las unidades de producción y consumo, serán los que conduzcan a la situación de equilibrio óptima.

De este modo, las empresas aceptan el precio que viene determinado por el mercado, los agentes económicos poseen información perfecta sobre las transacciones que realizan. El producto es homogéneo, y sus características son conocidas. Las empresas pueden comprar todos los factores necesarios, y así poder vender todos los productos que deseen. Los mercados son universales.

Algunas de las críticas a dicha teoría son: Que la empresa no considera la dimensión humana ni la organizativa, y no tiene la capacidad de tomar decisiones. Considerar que los precios de los factores y de los productos vienen determinados por el mercado, no tienen sentido algunas funciones de la empresa como la de marketing. Todas las empresas disponen de la misma tecnología, por lo que se eliminan las ventajas competitivas. Al existir información perfecta, hace que todos los agentes sean capaces de procesarla con exactitud, y elegir racionalmente. Por último, las transacciones son realizadas por agentes impersonales, dejando de lado la reputación, la credibilidad y la confianza entre los participantes.

En suma, para el enfoque neoclásico, la empresa se reduce a una caja negra de decisiones, acciones y comportamientos automatizados, bajo unos supuestos totalmente alejados de la realidad.

TEORIA DE LOS COSTES DE TRANSACCION

Según esta teoría, la empresa y el mercado son dos formas alternativas de organización económica. La elección entre una forma y otra, depende de los “costes de transacción”, que son los costes de utilización del mecanismo de precios.

El empresario, es quien mediante su poder jerárquico decide cómo se asignan los recursos, ahorrando costes derivados de operar en el mercado. Según dicha teoría, la división del trabajo crea la necesidad de coordinar las diversas actividades necesarias para la producción de un bien o servicio. La forma más eficiente de producción, será aquella que minimice los costes de producción, de comercialización, y aquellos costes relacionados con las transacciones o intercambios.

Además, existen fallos del mercado, relacionados con la incertidumbre que rodea las transacciones, la racionalidad limitada de los agentes y los posibles comportamientos oportunistas. Estos fallos explicarían la opción por formas jerárquicas para organizar las transacciones.

Las fuentes fundamentales de los costes de transacción serian: costes de información (derivados de la búsqueda e identificación de los agentes que intervendrán en la transacción); costes de negociación (consecuencia de la redacción y estipulación del conjunto de cláusulas y condiciones de acuerdo); costes de garantía (vinculados a la supervisión del cumplimiento del contrato).

Las empresas, como forma jerárquica, surgirían como mecanismo alternativos que reducen o eliminan los costes de mercado, mediante la internalización sucesiva de transacciones, ampliando así su ámbito vertical y horizontal, es decir, la empresa crecería anulando el mercado.

Los costes de coordinación interna son los siguientes: costes de pérdida de control ( producidos por la dificultad de transmitir información a través de redes de comunicación interna, a mayor empresa, mayor riesgo de error); costes de influencia (para el funcionamiento de la organización, se necesita de un centro decisor que planifique y ordene las acciones de los individuos, y estas decisiones, estarán influenciadas por la información proporcionada de los subordinados); costes de agencia (habitualmente, se utiliza la delegación en el diseño de estructuras de gobierno, con el fin de reducir la necesidad de comunicaciones verticales, con el riesgo de que aparezcan conductas oportunistas por parte del delegado).

La empresa, no suplanta al mercado como mecanismo de asignación, sino que lo reemplaza en aquellas actividades en las que puede lograr una asignación más eficiente de los recursos, por lo que el crecimiento de la empresa se detendrá cuando los costes de organizar una nueva transacción en su interior se iguales a los costes de realizar la misma a través del mercado.

TEORIA DE LA AGENCIA

Según dicha teoría, se estudia a las organizaciones a través de las relaciones contractuales que se establecen entre los individuos que las integran. Esta teoría, cree que el funcionamiento de las organizaciones y el comportamiento de los individuos dentro de las mismas se pueden explicar a través del estudio de las relaciones de agencia (contrato que se establece cuando una o más personas emplea a otra persona para desempeñar una actividad en su nombre, por lo que existen dos partes: el principal (cede el trabajo en otra persona), y el agente (el que lleva a cabo el trabajo), estableciéndose así, una relación de agencia. De este modo, la empresa se concibe como un nexo de contratos.

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