COMPORTAMIENTO Y SALUD- ADELA FUSTÉ-ESCOLANO

COMPORTAMIENTO Y SALUD- ADELA FUSTÉ-ESCOLANO

Existe una relación desde siempre conocida, entra el binomio de salud y enfermedad con la vida psíquica; para todo hombre en muchas ocasiones, el dolor psíquico se transforma en estados de enfermedad, y así de forma contraria, algunas enfermedades físicas, por ejemplo, conducen a la depresión, la ansiedad, la angustia, entre otras que afectan la psiquis del hombre.

Siempre se ha tratado de buscar el génesis de esta relación, una forma del hallazgo profundo de la enfermedad y salud como conceptos singulares, es reseñar a la enfermedad y a la salud como estados del ser humano.

No obstante, el hombre nunca está del todo sano o enfermo, en él se reflejan algunas etapas de la psiquis. Ello depende del funcionamiento de su organismos, es  así que cuando convergen las funciones corporales al unísono le llamamos salud, si éstas se perturban hablamos de enfermedad. Ahora bien, este desbalance se producirá entonces a nivel mental, y se manifestara a nivel físico, por lo tanto si una persona sufre una alteración o desequilibrio en su conciencia se manifestará en su organismo en forma de síntoma.

Es por mencionar un ejemplo, algunas alteraciones a nivel cardiovascular que pueden ocurrir en personas que manejan presiones a nivel laboral, familiar e incluso amoroso, personas que tienen niveles de ansiedad, angustia o preocupación que pueden desencadenar a ulceras gastrointestinales, como uno de tantos.

Como podemos dilucidar, esta relación entre lo fisiológico, lo orgánico, con lo psicológico, lo mental, es un relación no tan fácil de interpretar o definir e incluso con interrogantes aun por responder, quizá es por ello que ha sido una de las relaciones más antiguas, estudiada por grandes filósofos, como uno de los iconos de los estudiantes de medicina, como Hipócrates que proponía una explicación fisiológica de las diferencias individuales en la conducta, relacionando asimismo las disposiciones biopsicologicas de la personalidad con la susceptibilidad a padecer determinadas enfermedades.

Es como ahora en tiempos modernos con la psiconeruinmunologia, que se basa en estudios científicos que mostraron que produciendo una señal inversiva a través del sistema nervioso se podían condicionar las respuestas del sistema inmune, por lo cual se aprecia que el sistema nervioso central y el sistema inmunológico se comunican entre sí, llegando a conclusiones tales como que la mente, las emociones y el cuerpo se encuentran íntimamente interrelacionados y que el sistema inmunológico y el cerebro pueden aprender uno del otro, es decir que el hombre trabaja desde una perspectiva interdisciplinaria que reúne un abanico de diversas espacialidades y campos de la ciencia como lo veremos a lo largo de este escrito.

Hablemos ahora del estrés que como mencionan algunos autores, es la patología del siglo 21, este que tiene una radical influencia en la capacidad de adaptarse a los resultados de patologías. El origen del estrés tiene que ver mucho con la manera como pensamos y la forma como vemos la realidad.  De hecho, depende del tipo  de pensamiento que tenemos lo que nos va a llevar a un tipo de emociones que van a ser acorde a estos pensamientos,  los cuales pueden ser negativos que por supuesto no podemos controlar lo que traduce en conductas que son insanas, tóxicas,  como desarrollar obsesiones o una ansiedad generalizada, de lo que hablaremos más adelante.

Desde el punto de vista de un estudiante de pregrado de medicina, carrera que guarda una cercana relación con la psicología, hemos de pensar en cosas como enfermedades crónicas, que sin lugar a duda tienen conexión con la psiquis humana, desde el punto de que como seres humanos creamos competencias, desarrollamos habilidades, creamos costumbres, hábitos, estos últimos a su vez son clave en el desarrollo de algunas patologías, como la obesidad, las enfermedades cardiovasculares o el cáncer, que suponen uno de los mayores problemas de salud en nuestro país,  La mayoría de las enfermedades crónicas se pueden prevenir manteniendo al límite unos factores de riesgo comunes, que después de tantos semestres, conocemos muy bien ,por ejemplo hay muchos factores relacionados con la enfermedad pueden afectar directa o indirectamente la personalidad o viceversa, tenemos en la literatura ejemplos directos como los ACV, o algunas intoxicaciones, ya de forma indirecta hablaríamos de la consecuencia del uso crónico de algún medicamento, por ejemplo. 

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