ClubEnsayos.com - Ensayos de Calidad, Tareas y Monografias
Buscar

Los estresores son los acontecimientos o circunstancias que generan el estrés


Enviado por   •  13 de Marzo de 2017  •  Resumen  •  5.178 Palabras (21 Páginas)  •  329 Visitas

Página 1 de 21

    Fuentes de estrés

Los estresores son los acontecimientos o circunstancias que generan el estrés; varían en intensidad y duración (del fastidio moderado y breve por haber perdido las llaves o los lentes a la tragedia prolongada de cuidar a un padre que sufre la enfermedad de Alzheimer). Además, el mismo evento, por ejemplo, un examen de química, puede ser un estresor para una persona, pero no para otra. Algunas personas son sumamente sensibles a las amenazas de fracaso o humillación; a otras les atemorizan ciertas experiencias u objetos específicos. Pero las peleas con los amigos, la presión en el trabajo, los conflictos en el hogar, la vergüenza pública y los regaños personales son estresores casi para todos. Incluso en las situaciones estresantes, cuando nuestra vida o futuro están en riesgo, el momento de mayor estrés no necesariamente es el de mayor peligro. Por lo general experimentamos el mayor estrés cuando anticipamos el peligro. Por ejemplo, los paracaidistas reportan sentir más miedo en el momento en que se acerca el salto. Una vez que están en la línea y no pueden regresar, se tranquilizan. Para el momento en que llega la parte más peligrosa del salto (cuando van en caída libre esperando que el paracaídas se abra), sus temores han disminuido (Epstein, 1962). De manera similar, la tensión y las peleas que llevan a una decisión de divorciarse y las negociaciones sobre la custodia de los niños y la distribución de propiedades con frecuencia son más estresantes que el divorcio en sí mismo. De hecho, la consumación oficial del divorcio se convierte en un alivio. El estrés no se limita a situaciones de vida o muerte o a experiencias desagradables. Incluso las ocasiones felices generan estrés porque requieren que hagamos

Cambios de la vida

Todos los estresores que hemos considerado implican un cambio. La mayoría de la gente busca que en su vida haya orden, continuidad y acontecimientos predecibles. Por esa razón, experimenta el cambio, ya sea bueno o malo, como estresante. En general, cuanto mayor ajuste requiera un evento, más estresante será. Del mismo modo, el estrés aumenta cuando la gente debe afrontar un gran número de cambios en un tiempo relativamente corto. El instrumento clásico para medir la cantidad de estrés que una persona está experimentando como resultado de los “cambios de la vida” es la Escala de Evaluación de Reajuste Social (EERS), diseñada por T. H. Holmes y R. H. Rahe (1967). La escala consta de varias docenas de eventos a los que se asigna un valor en puntos con base en la cantidad de ajuste que requieren. Para determinar la cantidad de estrés que experimentó una persona en un periodo determinado, simplemente se suman las puntuaciones de estrés de todos los cambios que tuvo que afrontar. Aunque es intuitivamente atractivo, algunos de los reactivos de la EERS tratan con eventos que sólo son apropiados para adultos (por ejemplo, la muerte del cónyuge, la jubilación o un cambio en las responsabilidades laborales

Nimiedades de la vida cotidiana

Muchos de los reactivos de la EERS y del Inventario de Estrés en la Vida Universitaria atañen al estrés que surge de eventos muy impresionantes y relativamente poco frecuentes. Sin embargo, muchos psicólogos han señalado que también las “nimiedades”, molestias, irritaciones y frustraciones insignificantes de la vida generan mucho estrés. Asuntos aparentemente menores como un cierre roto, esperar en una larga fila una discusión insignificante con un amigo cobran su cuota. Lazarus cree que los grandes eventos importan tanto porque disparan numerosas nimiedades que a la larga nos abrumarán con estrés. “No son los eventos grandes y drásticos los que hacen la diferencia,” advierte Lazarus, “sino lo que sucede día a día, ya sea que se deba o no a eventos importantes” (1981, p. 62). Los eventos importantes y menores son estresantes en gran medida porque conducen a sentimientos de presión, frustración y conflicto. Presión La presión ocurre cuando nos sentimos obligados a apresurar, intensificar o cambiar la dirección de nuestra conducta o cuando nos sentimos forzados a satisfacer un estándar más alto de

La frustración

 ocurre cuando se impide que una persona alcance una meta porque algo o alguien se interpone en camino: un estudiante de bachillerato con altas puntuaciones en las pruebas de desempeño y un elevado promedio es rechazado en una escuela de prestigio; una mujer no recibe una promoción con el argumento de que no tiene experiencia de manufacturación; el presupuesto de un científico se corta justo cuando está cerca de un gran avance; un aviador que constantemente enfrenta demoras y cancelaciones de los vuelos; es probable que todas estas personas experimenten frustración. Además de esas fuentes importantes de frustración, existen innumerables frustraciones menores que pueden sumarse para causar un estrés significativo. Morris identificó cinco fuentes de frustración que son especialmente comunes en la vida del estadounidense promedio. Las demoras son fastidiosas porque la cultura aprecia mucho el valor del tiempo. La falta de recursos es frustrante para aquellos que no pueden costearse un automóvil último modelo o las vacaciones espléndidas que los medios de comunicación masiva presentan como un derecho de todo ciudadano. Las pérdidas, como el final de un romance o una amistad muy querida, causan frustración porque nos hacen sentir indefensos, poco importantes o sin valor. El fracaso genera intensa frustración (y la culpa concomitante) en nuestra sociedad competitiva. Nuestra cultura sostiene que el éxito o el fracaso dependen del talento y el esfuerzo individual, no de la suerte, la buena fortuna o del simple hecho de estar en el lugar correcto en el momento indicado. Imaginamos que si hubiéramos hecho las cosas de manera diferente habríamos tenido éxito; por esa razón, solemos sentirnos personalmente responsables de nuestros reveses y tendemos a aceptar que los demás nos culpen por no esforzarnos más o por no ser más listos. La discriminación también causa frustración: el hecho de que a la gente se le nieguen oportunidades o reconocimiento simplemente por su sexo, edad, religión o color de piel disminuye su fe en el futuro y en sí misma.

El conflicto de aproximación/aproximación ocurre cuando la persona es atraída al mismo tiempo por dos metas deseables. Algunos ejemplos son un estudiante que fue aceptado por dos universidades importantes, un solicitante de empleo al que se le ofrecen dos posiciones igualmente excitantes y de alta paga o una persona que encuentra dos apartamentos igualmente atractivos, ninguno de los cuales tiene desventajas importantes. El estrés en el conflicto de aproximación/aproximación surge del hecho de que, al elegir una opción deseable, debemos renunciar a la otra.

...

Descargar como (para miembros actualizados) txt (33 Kb) pdf (229 Kb) docx (24 Kb)
Leer 20 páginas más »
Disponible sólo en Clubensayos.com