Los valores forman parte de los problemas y de la vida diaria de todas las personas

FORMACIÓN DE VALORES

Los valores forman parte de los problemas y de la vida diaria de todas las personas. Es importante transmitir valores mientras educamos a los hijos, pero ya que el tema de los valores es muy extenso, a los niños es necesario hacérselos entender de una manera sencilla pero que impacte de manera permanente en su formación ética.

Desde tiempos prehistóricos hay valores, aunque en esos tiempos sólo eran en base a la supervivencia, no había valores personales. A través de los siglos, la necesidad de reguladores de la conducta fue evolucionando.

Hay varios tipos de valores: culturales, materiales, espirituales, personales, familiares, morales, etc., el concepto de valores dependerá de quién lo diga, un filósofo, sociólogo, psicólogo, pedagogo, pero de una manera general los valores son referencias fundamentales de lo que se debe hacer o no, son una guía, nos dan una dirección, son reguladores de la conducta y organizadores de la moral, y tienen ciertas funciones básicas.

• Jerarquizar: lo que importa y lo que no.
• Decidir: Tomar decisiones.
• Evaluar: Saber si se actúa de manera correcta o no.
• Reforzar/modificar: cambiar o seguir con cierta conducta.

Los valores son un factor equilibrante entre las emociones y el análisis de las acciones.

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Para nuestros fines, tenemos tres valores primarios: respeto, responsabilidad y honestidad, que así como los colores primarios que cuando se combinan crean nuevos colores, cuando esos tres valores se combinan podemos obtener más valores.

Así como en otros aspectos de la educación, para inculcar valores a nuestros hijos debemos predicar con el ejemplo.

RESPETO:

Primero que nada, debemos tener respeto hacia nosotros mismos, respetar nuestro cuerpo y todo lo que somos, después tener respeto por nuestra pareja, a la familia, a la comunidad, a la sociedad, al medio ambiente, al bien común, a la diversidad, etc. Tener respeto es tener buenos modales, es mirar al otro por lo que es, sin juzgar, darle su tiempo y su espacio.

RESPONSABILIDAD:

Nuestra ética, lo que está bien o mal, nuestras acciones, siempre están en nuestras manos, responsabilidad es tener la capacidad para responder por lo que hemos hecho, lo cual nos lleva al aprendizaje, al desarrollo espiritual y  a la superación personal.

HONESTIDAD:

La honestidad no se trata de ser perfectos sino de corregir nuestras acciones, de aceptar que nos hemos equivocado, es actuar de tal manera que no nos defraudemos a nosotros mismo ni a los demás, de no engañar y de no apropiarse de lo que no es nuestro.

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