Pedagogía para la solución de conflictos

Conceptos

 (Arendt)

Violencia: La violencia organizada, no sigue con nosotros por un deseo de muerte, un irreprimible instinto de ataque; o por los peligros de desarme, como los peligros sociales y económicos, sino el simple hecho de que no haya aparecido todavía en la circunstancia política un sustituto de este arbitro final. La violencia se relaciona de manera habitual con el poder ya que el poder es el dominio del hombre sobre el hombre, la violencia tiene que ver con los instrumentos para aumentar la potencia natural de un individuo y esta necesita guía, justificación y herramientas; esta puede ser justificable pero jamás será legítima.

Fuerza: Esta generación se caracteriza por su gran coraje e inteligencia y por la gran voluntad de acción, como también por una sorprendente confianza en la posibilidad de cambios en la humanidad como la manera de pensar con respecto a lo vivido en las guerras y grandes escenas de violencia del pasado. La fuerza va de la mano con la violencia y el poder, esta es la cualidad natural de una persona en aislamiento; es su función corporal, se podría decir que los términos violencia y fuerza pueden considerarse sinónimos o formas posibles del poder mismo.

Poder: Para nadie es un  secreto que esta generación ha crecido con la bomba atómica, han heredado de la generación pasada los acontecimientos y experiencia de una era masiva  de  violencia criminal como en la política, la existencia de los campos de concentración y de exterminio, de la tortura y genocidio; además debemos tener en cuenta que con solo unas pocas armas y un grupo pequeño de individuos podrían alterar el orden de las fuentes del poder  nacional. El poder no necesita alguna justificación, solo requiere de legitimidad de origen; el poder y la violencia no son lo mismo, ambos no pueden dominar, donde uno de ellos lo haga el otro desaparece en su totalidad, la violencia destruye al poder y este es incapaz de crearlo.

Hechos ocurridos en Colombia durante la mitad del siglo XX

¿Qué relación tiene con los conceptos?

¿Qué responsabilidad tiene el Estado dentro de estos hechos?

Surgimiento del Narcotráfico

El narcotráfico va de la mano con el poder y la fuerza ya que los narcotraficantes se crean su propio poder abriendo paso a la violencia generando en el país corrupción, asesinatos, secuestros y extorsión, entre otros.

El gobierno colombiano y la policía nacional tienen la responsabilidad de eliminar el narcotráfico del país, estar atentos tanto en todas las salidas del país como dentro del territorio nacional, como también de los políticos, militares y tenientes que se abren paso a la corrupción.

El bogotazo (1948)        

Este hecho estuvo masivamente violento dejando gran destrucción al país como también el alzamiento de varios partidos políticos llenos de poder que causaron esta situación tan lamentable lleno de asesinatos y destrucción

La policía trataba de mantener el orden, sin embargo esta era malinterpretada, si la policía lograba tener el control de la situación, se alegaba violencia oficial contra el partido conservador. Por otro lado dos jefes opuestos Diego Montaña Cuéllar y Gerardo Molina se enfrentaron produciendo serios disturbios, estos fueron controlados por la Policía de Bogotá.

Fuerzas Armadas Revolucionarias de Colombia-Ejército del Pueblo  (FARC-EP)

La Guerrilla de las FARC-EP fue un hecho muy sangriento para todos los ciudadanos del país, pero la violencia para los niños y adolescentes del país fue abrupta fueron sometidos a reclutamientos y víctimas de violencia y abuso sexual por parte de este grupo armado.

El Estado Colombiano es responsable internacionalmente cuando este no defiende ni protege los derechos de los niños, niñas y adolescentes, como también tiene obligaciones internas de protección jurídica, material y formal para los niños, niñas y adolescentes del país.

En los procesos de negociación por parte del  gobierno colombiano y la Guerrilla  de las FARC-EP, se trataba de llegar a la paz  mediante el proceso de negociación en este se acordó la desmilitarización de un territorio de gran extensión de 42.000 kilómetros cuadrados.

Masacres de remedios, Antioquia (1982 y 1997) 

Las masacres acontecidas en Segovia y Remedios locaciones ubicadas en Antioquia, es el secuela de una violencia que persistía en Colombia desde hace más de medio siglo, enfrentamientos de poderes llevados por el odio y la ideología política, una violencia que hoy en día persiste, son actos de violencia y abuso  que tenía como fin el lograr el terror de la población, es una forma de dominio bajo la fuerza.

La responsabilidad del Estado  Colombiano   frente a los daños ocasionados por el conflicto armado acontecido en Antioquia y de la consecuencia que tiene esta en cuanto a la vida de un ciudadano  y la existencia de daño material como inmaterial.

El estado debe responder por la falla en el servicio y garantizar a la población de Antioquia que no se repetirá  más actos como estos y además condenar a cada uno de los que participaron en estás masacres, entre ellos militares, comerciantes, políticos, paramilitares y casa persona que intervino de manera directa o no directa con estos hechos terroristas .

Toma del Palacio de Justicia (1985)

El palacio de Justicia fue tomado por la fuerza de manera violenta tomando aproximadamente 350 rehenes y dejando 101 muertos entre ellos algunos magistrados del momento, como también la gran destrucción de la edificación.

El ejército nacional llegó al suceso y rodeó el Palacio con tanquetas, y este tomó el Museo como centro de operaciones, el presidente de ese entonces Belisario Betancourt explicaba las razones por las que nunca dio la orden estatal de alto al fuego. En 2014 la Corte Interamericana de Derechos Humanos (CIDH) hicieron responsable al Estado colombiano de grandes violaciones de derechos humanos y en 2015 el Estado colombiano reconoció su responsabilidad y se disculpó con todas las victimas del suceso , en ese entonces el presidente de la república Juan Manuel Santos afirmó que los agentes del estado tuvieron fallas en la retoma del Palacio de Justicia y hasta la fecha existe solamente una condena contra el general Jesús Armando Arias Cabrales a causa de la desaparición de 5 de las 12 víctimas, con una pena de 30 años de cárcel.

Exterminio de la Unión Patriótica UP (1984)

La violencia contra la unión patriótica dejó al menos 4.153 pérdidas lo cual es un número extremadamente preocupante entre ellos candidatos a la presidencia, congresistas, disputados, entre otros

El presidente en turno Juan Manuel Santos reconoció la responsabilidad que tuvo el estado en el hecho acontecido, reconoció la persecución, desaparición y muerte de un gran número de sus miembros y que el Estado no tomó las medidas suficientes para impedir este terrible hecho y que el exterminio de la Unión Patriótica (UP), fue un genocidio político

Ejército de Liberación Nacional (ELN)

Esta organización guerrillera devastó al Estado colombiano violando una cantidad masiva de derechos humanos, haciendo reclutamientos a la fuerza  a niños y adolescentes, un gran número de secuestros, ataques al patrimonio del país y una gran destrucción de este, asesinatos violentos y un sinfín de atropellos al pueblo colombiano.

El presidente Iván Duque ordenó el levantamiento de la comisión del gobierno de la mesa de negociación que se había formado con esa organización en Cuba y ordenó captura en contra de los cabecillas de la Guerrilla.

El gobierno de Álvaro Uribe Vélez fue el que más se acercó a tener un acuerdo con el ELN

Para el estado las mayores dificultades durante el proceso de paz ha sido la reticencia de ELN en relación al abandono de las armas esto lo ven como una manera de redición.

Movimiento 19 de Abril (M-19)

En todas las organizaciones guerrilleras se puede ver que la violencia y la guerra a la fuerza es predominante y el M-19 no es la excepción en ella se presentaron gran cantidad de robos, secuestros, asesinatos y abusos a los ciudadanos colombianos.

El acuerdo de paz entre el Estado Colombiano y el M-19 fue firmado  y en términos generales este funcionó, el grupo guerrillero dejó las armas, el estado garantizó la participación política de los combatientes y hasta día de hoy algunos de ellos ejercen dentro de la legalidad.