Angustia Existencial en el Mundo Moderno

Angustia Existencial En El Mundo Moderno.

Cuando veo a un hombre en estado de ansiedad…

no puedo afirmar que no sea un ejecutante de lira,

pero sí puedo decir otra cosa… Y ante todo,

 lo llamo forastero y digo: Este hombre no sabe dónde está.

Epicteto (60-120 d.C), De la ansiedad.

Hace dos años no voy a el colegio de manera presencial, la pandemia empezó y con esta la cuarentena, las personas sentían pánico, una reacción que era de esperarse ante tal estrambótica situación. Poco a poco los negocios empezaban a cambiar sus horarios y con el tiempo progresivamente cerraban por completo, la economía por obvias razones no estaba en su esplendor, y esto se notaba en la gente, a todo esto le sumamos el peso de los seres queridos de tantas familias que partieron debido a la enfermedad, todos los días se escuchaba como alguien diferente no lograba vencer el COVID-19.

Siendo sincera los primeros meses no le di tanto cuidado, notaba como a las demás personas comenzaban a extrañar la normalidad, pero yo sentía que me había adaptado bastante rápido, no salía y tampoco me hacía falta hacerlo, así transcurrieron los primeros meses para mí. A mediados de año tuve una nueva experiencia en mi vida, no tan nueva ya que se me hacía un sentimiento familiar, pero nunca lo había notado, empecé a pasar más y más tiempo encerrada en mi cuarto, pasaba casi todo el día con el celular en la mano, no hablaba con nadie, este confinamiento me hizo darme cuenta de lo sola que me sentía, no sabía explicar mis sentimientos por lo que mucho menos intentaba decírselos a alguien.

Nunca había dado una clase de filosofía, no sabía que todo lo que sentía y pensaba sobre mi vida, lo que hacía o no hacía, o por qué lo hacía, era de las preguntas más comunes que existen en este campo, cuando las personas se empiezan a perder a si mismas, sea por la razón que sea, es donde empieza la angustia existencial.

¿Angustia existencial?, sí. Es la existencia humana inherente, revelando su condición, asociándose con el cuidado, la responsabilidad y libertad. La angustia existencial siempre estimula el cuestionamiento de la situación que se origina a partir de la experiencia e incita a la búsqueda de nuevos caminos. Soren Kierkegaard (1844) fue el primero que nos enseñó el lado positivo de ese estado, él señala: “Necesitamos una cierta dosis de angustia para mantener un nivel de vigilancia y diligencia- de lo contrario nos mantenemos en un conformismo tibio y paralizante”. 

Sin embargo, hay que destacar otras aportaciones más del pensador sobre este tema. Primero, haber hecho una clara distinción entre miedo y angustia por primera vez.

El miedo es una reacción ante una amenaza concreta y definida, y la angustia surge ante una posible amenaza. En segundo lugar, haber destacado también el aspecto positivo de la angustia, como anteriormente mencionaba; Es cierto que en este estado nos tensamos y sufrimos, pero su inquietud es una forma de alterarnos y estimularnos en la búsqueda de una mejor alternativa. En tercer lugar, Kierkegaard nos enseñó que la angustia es una constante humana, derivada de la responsabilidad y la expresión de nuestra libertad; no es meramente fortuito, producto de circunstancias adversas.

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