Axiomas comunicacion

 El acto de la comunicación humana es uno de los procesos más complejos que replicamos día a día, tanto a nivel oral y físico como mental. Los motivos que abarcan los porqués de su complejidad son varios; desde el amplio abanico de factores culturales que alteran las normas sociales reflejadas en el acto comunicativo, hasta la percepción personal construida en nuestro desarrollo psicosocial, la cual puede llegar a trazar una visión completamente diferente de la acción verbal a la que posee el interlocutor contrario.

Por esto mismo, es necesario sentar un cimiento concreto en este proceso; de forma que podamos clarificar los distintos estratos que ahondan en el habla y la construcción constante de los rasgos socioculturales que enriquecen al ser humano y conforman, al fin y al cabo, las concepciones bajo la cual se rige su estructura psicológica individual. Comprender la comunicación es, entonces, comprender un pilar fundamental de la psicología humana y, como consecuente, a la misma sociedad.

La profundidad del acto comunicativo ha llevado a especialistas y científicos a investigar y teorizar sobre el mismo. Una base bien aceptada dentro de los varios estudios planteados sobre el tema es la de la existencia de cinco axiomas fundamentales dentro de la comunicación humana, postulados por Paul Watzlawick. Para comprender cada uno de ellos, podemos analizar un diálogo cualquiera e identificar varios patrones señalados en la teoría de P.W. Tenemos como ejemplo el diálogo presentado en clases: En este mismo diálogo, también contemplamos varios elementos de la comunicación verbal y no verbal y de la escucha activa.

Desde un comienzo, apreciamos el primer axioma planteado por Watzlawick: “Es imposible no comunicar”. Aun cuando el personaje del esposo no dice una palabra durante la discusión entre las mujeres, expresa vívidamente sus emociones y miedo mediante gestos corporales y faciales, denotando así preocupación y hasta incluso miedo. El rol de este personaje durante este primer momento está estrechamente relacionado, a su vez, con los conceptos de lenguaje no verbal; pues todo lo que transmite lo hace sin hacer uso de palabras. También encontramos varios elementos de este concepto en la parte final del diálogo, donde la pareja conversa a solas y deja ver la angustia que les provoca la situación mediante varios gestos corporales y de dicción: encogiéndose, denotando frustración en el tono de voz, consolando al otro acariciándole la espalda, entre otros. Por lo tanto, y en congruencia con la teoría de la comunicación, concluimos que el ser humano se encuentra a cada momento comunicando y transmitiendo todo tipo de información.

El segundo axioma es aquel que habla sobre los niveles de contenido y las relaciones de la comunicación entre los interlocutores, afirmando que este último influye en el primero. Es evidente que existe una gran diferencia en el nivel de relación que tiene la madre con su hijo y en el que posee la madre con su nuera; siendo uno mucho más positivo y ameno que el otro. Por lo mismo, para el personaje de la madre, existirá una interpretación mucho más agresiva del contenido transmitido por la nuera que el que le transmita su hijo; como cuando este le responde (tras escuchar activamente la discusión) con palabras que buscan tranquilizarla, logrando centrar su atención en otra cosa que no sea el ya iniciado altercado. No obstante, debido a su escasísima afinidad con su nuera, prontamente vuelve a discutir con ella cuando esta vuelve a interferir en el diálogo.

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