Casos clínicos psicología

ACTIVIDAD TEMA II – CASOS CLÍNICOS PSICOLOGIA

Evaluar cada caso y justificar el diagnóstico y la pertinencia del tratamiento en base a la historia descrita en cada uno de ellos. Ayudándose y empleando en la medida de lo posible los manuales DSM IV, DSM-5 y CIE 10.

En caso de ser evaluada como conveniente una intervención se deben especificar y justificar los siguientes apartados:

- ¿Qué información sería crítica o necesaria reunir y que asunciones van a tomarse al no disponer de esta?

- ¿Qué aproximaciones terapéuticas se van a utilizar?, ¿En qué lugar se va a realizar la intervención?, ¿Qué fármacos (si procede) van a ser empleados? y ¿En qué régimen de administración?

- ¿Qué posibles complicaciones pueden surgir y que alternativas terapéuticas podrían implementarse en cada situación?

Debe tenerse en cuenta el curso temporal de la intervención (abordaje de la desintoxicación, manejo del síndrome de abstinencia, terapia de mantenimiento…), así como citar, artículos científicos y grado de evidencia/confianza para respaldar estas accione

Varón de 17 años. Dimitri, alias la Chinita, es un niño de origen ruso que desde hace 4 años hace su vida entorno a los puntos de venta de droga de la ciudad. Dimitri fue adoptado cuando tenía poco más de 9 años. El pequeño y sus padres no consiguieron adaptarse a la nueva situación y los conflictos pronto minaron la convivencia que comenzó a ser insostenible cuando el menor contaba con 13 años. Desde esa edad Dimitri se ha escapado constantemente tanto de casa de sus padres adoptivos como de los diferentes centros de menores en los que ha sido internado.

Durante estos últimos 5 años, la Chinita ha pasado de aspirar pegamento y pedir cigarros a ser el chico de los recados de los camellos y puntos de distribución. Ahora es uno de los personajes más conocidos del mercado local de droga. Esta escalada social también le ha proporcionado un mayor acceso a todas las sustancias que se mueven a su alrededor. La Chinita ha consumido cocaína y aun lo hace de manera muy esporádica, pero su droga predilecta es la heroína y sus esfuerzos diarios concluyen siempre en la obtención de más heroína. Por supuesto la Chinita ni está teniendo una escolarización adecuada ni siente falta alguna de la misma.

La policía está empezando a desmantelar la zona de venta donde mal vive la Chinita. Lo encontraron junto a una hoguera apagada prácticamente sin poder moverse ni hablar sin ahogarse. La Chinita estaba muy desorientado, con las pupilas dilatadas y balbuceando incoherencias. No fue capaz de recordar cómo había llegado allí, qué estaba haciendo, con quién andaba, qué había consumido y cuánto.

El chico alardea de ser un gran consumidor y tener una tolerancia prodigiosa “Yo ahora me como dos gramos y ni me meneo”. No hay registros de que la Chinita haya sufrido con anterioridad una sobredosis.

Policía y trabajadores sociales solicitan un plan de acción y desintoxicación para la Chinita.

EVALUACIÓN

En un primer momento, se recomienda realizar una evaluación más exhaustiva del caso mediante una entrevista clínica y diferentes pruebas psicométricas. De este modo, además de la información ya existente, se recogerán datos acerca del patrón de consumo, los problemas relacionados a éste, la posible existencia de un síndrome de abstinencia y el estado mental, entre otros. Además, se deben valorar las conductas de abuso y las posibles complicaciones médicas consecuentes. (Nivel de evidencia 1).

Por un lado, se recomienda hacer uso de la entrevista semiestructurada EuropASI (European Addiction Severity Index) (Kokkevi y Hartgers, 1995; Bobes y cols., 1996) con el objetivo de evaluar la gravedad de la adicción y poder establecer un plan de tratamiento individualizado para el paciente. Este instrumento cuenta con un grado de recomendación A. Por otro lado, se recomienda hacer uso de otros cuestionarios o entrevistas estandarizados y validados en caso de observar signos de patología comórbida o déficit cognitivo (Pereiro y Fernández, 2018).

DIAGNÓSTICO

Con la información existente de Dimitri “la Chinita”, haciendo uso del Manual Diagnóstico y Estadístico de Trastornos Mentales (DSM-5) (American Psychiatric Association, APA, 2013), es posible establecer un diagnóstico de Trastorno por consumo de opiáceos moderado o grave con intoxicación (F11.229). Por otro lado, el manual diagnóstico CIE-10 (Organización Mundial de la Salud, OMS, 1992), nombra este mismo diagnóstico como Dependencia de opiáceos con intoxicación no especificada (F11.229).

Se establece este diagnóstico ya que, a pesar de no haber indicios de que el paciente haya sufrido anteriormente una sobredosis, en el momento de ingreso Dimitri muestra los síntomas de una intoxicación por opiáceos según el DSM-5 (APA, 2013) (consumo reciente, cambios comportamentales y psicológicos después del consumo, midriasis, deterioro de la atención y la memoria y habla disártrica). Estos síntomas no son consecuencia de otra enfermedad médica u otro trastorno mental. Además, muestra signos del desarrollo de una tolerancia a los opiáceos ya que, en sus palabras, “Yo ahora me como dos gramos y ni me meneo”. Se observa también la posible dependencia a los opiáceos debido a que el paciente afirma que es su droga predilecta y ocupa gran parte del día en la obtención de la sustancia.

En conocimiento del posible diagnóstico se

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