Consecuencias En Su Desarrollo Comunicativo

Concepto (sordera y déficit auditivo)

Aquella persona cuya audición no es suficiente para comunicarse oralmente, necesitando para ello de amplificación y entrenamiento especializado. “Sordera”, para las perdidas auditivas graves y profundas, “Hipoacusia”, perdida auditiva en general, no solo en los casos mas graves, sino a cualquier pérdida.

Clasificación de las deficiencias auditivas

La localización Momento de perdida

Hipoacusia de transmisión o de conducción Sordera neurosensorial o de percepción Sordera mixta Prelocutiva Postiocutiva

Alteraciones que tiene lugar en el oído externo y/o medio. Afecta a la cantidad de sonido. Alteraciones que tienen lugar en el odio interno o en alguna región de la vía auditiva en el sistema nervioso central. Afectan a la cantidad y calidad de la percepción del sonido. Cuando están afectados simultáneamente el oído externo o medio y el interno. La perdida ocurre antes de que el niño adquiera el habla. Posterior a la adquisición del habla; la consolidación del lenguaje ya se ha efectuado.

Causas

Antecedentes de sordera endógena en familiares próximos, ligados a la dotación genética. Problemas acaecidos durante el embarazo. Problemas acaecidos en el nacimiento, bien durante el parto o en los primeros días. El padecimiento de otitis crónicas, meningitis, u otras enfermedades víricas como la parotiditis o el sarampión

Indicadores de perdida auditiva poslocutiva Indicadores de perdida auditiva prelocutiva

Les cuesta la comprensión de consignas: seguir las explicaciones en clase Cuando un recién nacido no se sobresalta al escuchar una fuerte palmada a uno o dos metros de distancia. (0-3 meses)

Le duelen con frecuencia los oídos, se resfría a menudo y presenta mucosidad No responde con emisiones a la voz humana (3-6 meses)

Dice mucho ¿Qué? Pregunta con mucha frecuencia que me has dicho No emite silabas: pa, ma, ta… (6-9 meses)

Muestra dificultades para identificar la procedencia de los sonidos. No responde a “dame…” si no se le hace el gesto indicativo con la mano (9-12 meses)

En los dictados pueden aparecer sustituciones, omisiones o distorsión de palabras. No señala objetos personales familiares cuando se nombran (12-18 meses)

Su voz es demasiado fuerte o demasiado débil No hace frases de dos palabras (18-24 meses)

Al llamar a veces responde y otras no “responde cuando quiere” No se le entienden las palabras que dice (3 años)

Tiende a fijarse en los labios y en la cara cundo se le habla No es capaz de mantener una conversación sencilla (4 años)

En lecturas colectivas suele perderse No manifiesta un lenguaje maduro ni lo emplea eficazmente y solo le entiende la familia (5 años)

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