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Diminio Personal


Enviado por   •  13 de Junio de 2014  •  2.555 Palabras (11 Páginas)  •  165 Visitas

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Dominio personal

El dominio personal es una disciplina que está íntimamente ligada con todo lo que realizamos diariamente, nos dota de habilidades para afrontar problemas y clarifica el sentido de nuestra vida.

En nuestra mente se encuentra la visión de lo que queremos realizar, pero nuestro subconsciente nos recuerda que existen valores y emociones las cuales pueden hacernos vulnerables y afectar en realizar o no nuestros objetivos, el dominio personal nos permite ser objetivos y sólo toma en cuenta las emociones que son concretas y favorables.

El dominio personal está implícito en nuestro subconsciente, ya que a través del subconsciente es que afrontamos la complejidad de las cosas. En nuestra mente puede radicar la clave del secreto que quizás determine nuestro futuro. El aprovechamiento de aptitudes mentales antes ignoradas puede ser central para construir la nueva organización personal.

Se llama subconsciente a esta dimensión de la mente porque opera debajo o detrás del nivel de conciencia, es decir, el inconsciente o mente automática. El subconsciente es muy receptivo a mentes que concuerdan con nuestras aspiraciones y valores más profundos, ello es porque estas aspiraciones más profundas se conectan directamente con la mente sub-consciente o forma parte de ella.

Esta parte llamada subconsciente o mente automática, es la que nos dirige al hacer las cosas, actividades cotidianas y repetitivas.

El nivel de consciencia es aquel que se refleja en la forma en que decidimos hacer las cosas. Las personas comprometidas con el desarrollo continuo del dominio personal practican alguna forma de meditación y logran trabajar con el subconsciente, esto puede ser muy útil para trabajar más productivamente con la mente.

La meditación es la concentración profunda de nuestra mente y espíritu, una vez que se logra la fusión de estas dos se logra un nivel de consciencia muy alto y productivo. En nuestro mundo a nuestros alrededor están las respuesta a todo lo que queremos saber pero como nuestra mente y nuestro espirito están desconectados es imposible que lo percibamos.

Nosotros somos los actores de nuestra vida y de las pequeñas y grandes elecciones depende nuestra existencia, tenemos la importante posibilidad de ser felices o no, a pesar de los acontecimientos en nuestra vida.

Esos acontecimientos no son los que manejan nuestra vida, sino nosotros mismos, manejamos nuestra felicidad dependiendo de la interpretación que hacemos de ellos. Somos lo que pensamos y si aprendemos a controlar nuestros pensamientos también así podremos controlar nuestras emociones.

Para poder darle sentido a nuestra vida es indispensable ver la realidad objetivamente, aceptar las cosas como son y aceptarnos tal y como somos, es decir, tener conciencia de nosotros mismos para poder dejar de sufrir y ser felices, en otras palabras, aprender a vivir.

Como nos dice Ignacio Larrañaga en su libro “Del sufrimiento a las paz” aprender a vivir es salvarnos a nosotros mismos y dejar de sufrir.

El primer paso para esta transición es salvarse a uno mismo; Salvarse: es el esfuerzo por el que uno mismo, por sus propios medios, se pone a salvo evitando caer en un peligro o saliendo de una situación mortal. La salvación es el arte de vivir, y el arte se aprende viviendo, y nadie puede vivir por alguien o en lugar de alguien. Hay que comenzar por creer en uno mismo y en la propia capacidad de salvación.

Para lograrlo, en primer lugar debemos despertarnos. El hombre, por lo general, es un sonámbulo que camina, se mueve, actúa pero está dormido. Abrir el paso desde el subconsciente al consciente, significa objetivar el sufrimiento que es puramente subjetivo. Para Larrañaga, dormir significa nadar en las aguas del inconsciente y de la subjetividad. Despertar es el arte de ver la naturaleza de las cosas, en uno mismo y en los demás, con objetividad, y no a través de prisma de mis deseos y temores. Es tomar conciencia de tus posibilidades e imposibilidades.

Las cosas existen en la medida en que existen en mi mente. En ese orden de ideas, controlando lo que sucede en nuestras cabezas podemos eliminar o mitigar el sufrimiento.

Muchas veces los acontecimientos pasados influyen en nuestras decisiones presentes y en ocasiones nos llevaran al fracaso, pero debemos ver al pasado como hechos consumados, ya que no hay manera de borrarlos ni modificarlos, por lo que no tiene sentido seguir sufriendo por ellos, ya no vale la pena.

En cuanto al fracaso, tenemos que analizar si realmente hemos agotado todos los medios para alcanzar cierto resultado. Y si es así, no se trataría de un fracaso sino que simplemente no se tuvo éxito. El fracaso es un concepto subjetivo y relativo, nace y vive en la mente cuando y en la medida en que rechazamos un resultado.

Mirando al futuro es necesario distinguir dos cosas: el esfuerzo y el resultado. El esfuerzo depende de uno mismo, pero el resultado no.

Según Larrañaga Tenemos que reconciliarnos con nosotros mismos, incluso con lo que rechazamos de nosotros, es decir aceptarnos, de lo contrario nos convertiremos en nuestros propios enemigos, todo lo que resistimos mentalmente lo convertimos automáticamente en nuestro enemigo. No podemos pretender que nos acepten los demás si damos una imagen negativa de nosotros mismos. Aceptar que las cosas sean lo que son, Aceptar la realidad y hacer lo que este mejor dentro de nuestras posibilidades nos llevará a tener autocontrol.

Tener autocontrol, es establecer esa armonía entre nuestro subconsciente y nuestros actos, nos guiara a ser sanos mentalmente, tener el deseo de triunfar y sentirnos realizados. Para lograrlo es necesario hacer una meditación profunda que nos ayuda a fortalecer nuestro carácter para estar en armonía con nuestros sentidos y proyectarlo en la realidad.

El dominio personal en las empresas hoy en día es de gran importancia, las organizaciones deben contar con personas con actitud positiva y que creen organizaciones abiertas al aprendizaje, ya que las personas que ahí trabajan son quienes tienen el control y le dan dirección a los objetivos de la empresa para llevarla a alcanzar el éxito o llevar a la empresa al completo fracaso.

Peter Senge nos menciona que sólo personas con capacidad para aprender pueden formar empresas abiertas al aprendizaje. Y en un mundo cambiante donde todo se encuentra en continuo movimiento, sólo las organizaciones que aprenden pueden acompañar los cambios o, mejor aún, generarlos.

Las organizaciones solo aprenden a través de individuos que aprenden. El aprendizaje individual

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