Diplomado Confrontar Sin Ofender

CONFRONTAR SI OFENDER

Los conflictos, las ofensas no son algo que se deban tomar a la ligera, ya que tienen tanto potencial como para causar una brecha Las palabras son herramientas de comunicación. Nunca mueren. Viven para siempre en el corazón y en la mente del que las escucha. Para mantener relaciones armoniosas en cada faceta de nuestras vidas, debemos aprender a utilizar las palabras de forma eficaz. Los conflictos y los malos entendidos son inevitables, y pueden producir una brecha permanente en las relaciones. Pero resolver un conflicto suele exigir confrontación.

Cuando te enfrentes cara a cara con otros, es importante que describas específicamente lo que has observado o experimentado. Dar rodeos o darles vueltas a las cosas acabará por sabotear tus resultados. Ser evasivo puede hacer que se pierda la idea principal o que se mal entienda lo que tratas de decir. Las palabras son herramientas de comunicación. Nunca mueren. Viven para siempre en el corazón y en la mente del que las escucha. Para mantener relaciones armoniosas en cada faceta de nuestras vidas, debemos aprender a utilizar las palabras de forma eficaz. Sean cuales fuesen las palabras que decidamos utilizar, hay que pensar que el tono con que las digamos determinará el modo en que esas palabras serán recibidas. El tono es la manifestación externa del estado actual de nuestra mente. Si por dentro estamos frunciendo el ceño, eso se reflejará en nuestras palabras. Si nos sentimos optimista, nuestras palabras lo expresarán. Es por eso debemos orar y pedir a Dios sabiduría y nos guie en todo momento que purifique tus pensamientos y limpie todo rastro de amargura y malentendido. Solo después de orar y de que Él nos ayude a dejar atrás nuestra ira, estaremos preparados para tratar el comportamiento problemático.

Son muchas de las cosas que debo cambiar después de a ver leído este libro enumerarlas sería muy difícil lo que me propongo es actuar en las principales que es en mi familia en especial con mi marido ya que a veces siento que soy como una olla a punto de ebullición debo pedir a DIOS mucho control de mis emociones y la habilidad para ser flexible y darme cuenta de que tengo que hacer más mía la palabra de Dios

Cuando aprenda a enfrentar las ofensas voy a dejar de ser y actuar como un víctima, mi auto estima subirá y ganare el respeto de los demás pero sobre todo el mío

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