ENSAYO DE LA PELÍCULA “LA NARANJA MECÁNICA”

ENSAYO DE LA PELÍCULA “LA NARANJA MECÁNICA”

La película del director Stanley Kubrick, titulada la naranja mecánica (1971), trata de un joven adolescente llamado Alex, quien tiene un forma muy particular de divertirse, es agresivo y acompañado de sus amigos, a quien llama sus “druguis”, comete actos delictivos, en los que disfruta de la tragedia y sufrimiento de las demás personas, en algunas ocasiones incluidos sus amigos. Alex, desde el inicio de la película se muestra como un delincuente, quien a raíz de varias fechorías, en una de ellas comete un homicidio por el que es sentenciado a 14 años de prisión. Al cumplir 2 años de su condena entra a un procedimiento experimental llamado “Tratamiento Ludovico”, mismo que promete cambiar la conducta de la persona y dejarla libre y rehabilitada para reinsertarse en la sociedad. Se podría decir que el tratamiento en este caso fue exitoso, ya que los instintos violentos de Alex desaparecieron, pero lo dejaron en indefensión.

De esta manera, considero que es importante comenzar este ensayo, respondiendo la primera de dos preguntas, que es: ¿Es ético el tratamiento que se la hace al protagonista? Se puede decir que el tratamiento no es ético por las siguientes razones: Alex no fue informado exactamente sobre lo que implicada someterse al procedimiento, en este punto creo que es necesario aclarar que el paciente, es un adolescente,  ya que en el libro de Anthony Burgess “Clockwork Orange”^[1] en el que está basada la película “La naranja mecánica”, Alex, tiene 15 años, y en el filme, tiene 18 años, es decir, que tomando en cuenta cualquiera de las dos edades, Alex, no era una persona en su total capacidad de decidir, siendo cierto que la mayoría de edad se la consigue a los 18 años, en este caso, se debería tomar en cuenta que el joven, ya tenía un precedente con la justicia, tomando en cuenta que en la visita del trabajador social a su domicilio, menciona problemas con la policía y un reformatorio, lo que pienso se debería haber señalado como precedente para un seguimiento que  asegure la estabilidad y el buen manejo del adolescente problema y por sus antecedentes, para precautelar la seguridad de las demás personas.

También hay que recalcar que como parte de un control que debería haber tenido Alex, su familia, tendría que saber el procedimiento al que se iba a someter, para funcionar como un red de apoyo para el paciente, en este caso, la familia se presenta como pacífica, contraria a Alex, pero no positivamente, ya que ellos tenían de algún modo, miedo a las reacciones del protagonista y se podría decir que demostraban cierto desinterés, ya que no sabían de las actividades de Alex, o no querían saber y fingían creer lo él les decía que hacía en las noches, o los dolores de cabeza por los que había ausentismo de la escuela, por eso creo que es razón de peso, tomar en cuenta la actitud de los padres, quienes no eran participes activos de la educación de su hijo, que por los antecedentes era problemático. Por este motivo, considero que lo ético hubiera sido que la familia completa esté inmersa en un tratamiento psicológico en el que se les psicoeduque y se les brinde herramientas para manejar al adolescente.

Otra de las razones por las que no es ético, es que Alex, cumple con los criterios de Trastorno de Personalidad Antisocial, descritos en el DSM-IV, que nos dice que es: “Patrón permanente de desprecio y violación de los derechos de los demás”^[2]. Además García (2012) afirma que:

“Como aparece en la Guía Británica del Trastorno de Personalidad Antisocial^[3], el trastorno antisocial lleva aparejado el fracaso escolar, elevadas tasas de desempleo entre los afectados, pobreza e inconsistencia en sus relaciones sociales. Muchos de los enfermos, prosigue el informe, ingresan en prisión o fallecen como consecuencia de su comportamiento irresponsable”. (p.17)

Así, con lo anteriormente planteado, está claro, que Alex, cumple con los criterios, y esto afecta su entorno, ya que hay ausentismo escolar, no trabaja, sus relaciones sociales se reducen a los amigos que son su banda delincuencial y a sus padres, con quienes no tiene una comunicación honesta. Además fue encarcelado y aunque no falleció, como consecuencia si intentó suicidarse al saltar de una ventana luego de salir libre gracias al “Tratamiento Ludovico”

En importante recalcar que como se mencionó anteriormente, Alex no estaba bien informado de en qué consistía el procedimiento, ya que se le aplicó el Suero 114, y cuando él preguntó qué era, le dijeron que se trataba de vitaminas, es decir que, le mintieron, además cuando ya está en la sala donde se hacían ver las imágenes, fue torturado, y aun cuando pedía que le suelten, los médicos continuaron viendo, haciendo caso omiso a sus súplicas. De esta manera, no se cumple con el consentimiento informado que debe imperar en nuestra práctica clínica y mucho menos con los principios fundamentales de la bioética, como Beneficencia, no maleficencia y el de Conocer para curar, no para manipular^[4]. Por lo tanto, el “Tratamiento Ludovico” aunque en principio podría tomarse como algo provechoso para el paciente involucrado, no es ético, al no informar todo sobre su aplicación, y al no considerar el trastorno y las particularidades de cada persona.

Según Millon, “artífice de la inclusión de los Trastornos de Personalidad en el sistema DSM. Los Trastornos de Personalidad se caracterizan por una lógica dimensional y se entienden como variantes activas o pasivas –según el grado de iniciativa del sujeto–, de determinados patrones de comportamiento interpersonal, cuyo carácter psicopatológico reside en una tendencia a generar conflictos intra e interpersonales y a no resolverlos”. (Citado en Quiroga, 2001)^[5]

Es decir, que el trastorno podría variar de acuerdo a la personalidad del paciente y como él, afronte sus problemas, de manera pasiva o agresiva en el caso de Alex. Al ser partícipe del “Tratamiento Ludovico”, el paciente quedó en indefensión total, puesto que no podía reaccionar ante los estímulos, tanto agresivos, como los que no, no se tomó en cuenta los límites y alcances del tratamiento, así como tampoco, el contexto externo al que iba a salir la persona, ya que Alex no podía reaccionar para defenderse, incluso, no pudo tocar a una mujer desnuda, fue víctima de violencia y humillación. Y aunque se podría pensar que lo tenía merecido porque él hacía lo mismo, no se toma en cuenta los motivos por los que actuaba así.

La segunda interrogante para responder es: ¿Es viable el “Tratamiento Ludovico” en una situación extrema como la de Alex? Se podría decir que si y que no, si sería viable si se tomara en cuenta lo antes mencionado, como el contexto familiar y social en el que está inmerso el protagonista, y tomando en cuenta la edad, ya que si el tratamiento funcionara tan bien como se piensa, sería una buena oportunidad para que Alex rehaga su vida, se reinserte en la sociedad como un ente adulto, productivo y responsable, alejándose de los actos delictivos.

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