El Desarrollo Del Ser Humano

El desarrollo del ser humano.

Erik Erikson:

Plantea que las etapas del hombre se dan siguiendo una secuencia del principio epigenético (orden natural interno, dándose una reprogramación genética en interacción el entorno) dando individuos diferentes entre si.

También plantea su idea de la crisis vital normativa, la cual se refiere que cada crisis propia de cada etapa de la vida lleva a un desenlace exitoso o negativo. Si es negativo en vez de exitoso se podrían generar detenciones como enfermedades físicas o psicológicas.

¿Cómo se desarrolla el ser humano según Jean Piaget?

Según Piaget, el ser humano tiene 4 etapas en la vida. La niñez, adolescencia, adultez y la vejez. Piaget decía que el ser humano tiene que pasar por éstas cuatro etapas para poder valerse por sí mismo. Consideraba que es un proceso largo y paulatino. Para él, los niños tienen una forma muy diferente de ver las cosas a como las ve un adulto. Es un proceso necesario para el ser humano.

¿Cómo se desarrolla el ser humano según Abraham Maslow?

Abraham Maslow, creó una pirámide de necesidades humanas que se clasifica en 5. Fisiología (respiración, alimentación, descanso, sexo y homeostasis), seguridad (seguridad física, de empleo, de recursos, de moral, familiar, de salud, de propiedad privada), afiliación (amistad, afecto, intimidad sexual), reconocimiento (autorreconocimiento, confianza, respeto y éxito), y autorrealización (moralidad, creatividad, espontaneidad, falta de prejuicios, aceptación de hechos y resolución de problemas).

Carl Gustav Jung

La persona representa nuestra imagen pública. La palabra, obviamente, está relacionada con el término persona y personalidad y proviene del latín que significa máscara. La persona es la máscara que nos ponemos antes de salir al mundo externo. Aunque se inicia siendo un arquetipo, con el tiempo vamos asumiéndola, llegando a ser la parte de nosotros más distantes del inconsciente colectivo.

En su mejor presentación, constituye la “buena impresión” que todos queremos brindar al satisfacer los roles que la sociedad nos exige. Pero, en su peor cara, puede confundirse incluso por nosotros mismos, de nuestra propia naturaleza. Algunas veces llegamos a creer que realmente somos lo que pretendemos ser.

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