El Vizconde Demediado

El libro comienza con una nota preliminar en la cual se explica el término: “Demediado” que significa o refiere: Dos personas o personalidades con distintas características. De ahí comienza lo mejor:

En el primer capítulo nos dice acerca del VIZCONDE MEDARDO DE TERRALBA, protagonista de la fabulosa historia, la cual es redactada por su joven sobrino, (nunca dice su nombre).

Medardo era un hombre poco experimentado, hablando en cuestiones de guerra, acompañado por su fiel escudero, llamado Curzio, son llamados ante la presencia del emperador, quien los cambia de rango y los envía a luchar contra los turcos.

Se me hace un poco difícil hablar por capítulos, de manera que a partir de aquí seguiré la historia sin separarla.

Bueno, pues debido a la inexperiencia del vizconde Medardo, quien no sabía que a los cañones se debe acercar por un lado, los turcos lanzaron un cañonazo, mismo que partió a Medardo a la mitad, y quien había ya perdido a su fiel escudero, víctima de los turcos, Medardo fue partido a la mitad y escogido entre los cuerpos para ser llevado a curaciones.

Del vizconde solo quedo una mitad, la derecha, que fue salvada y enviada a Terralba.

El padre de Medardo, El vizconde Aiolfo, hacía tiempo que tomo la decisión de vivir en la jaula de aves que tenía en el castillo a causa de que las aves eran su pasión. El había entrenado un Alcaudón para que hiciera algo que le ordenara. El ave regresa con Aiolfo y llega con un ala rota, una pata quebrada y solo un ojo, el padre entristeció y amaneció muerto.

Tras la muerte de su padre, Medardo cambio de manera absoluta, se volvió cruel, mataba a mansalva, condenaba a muerte a personas indefensas.

Medardo de Terralba tenía una persona que hacia sus maquinas medievales para matar a muchas personas y ya era experto en ello.

Había una persona que sabía absolutamente todo de él, Su nodriza, Sebastiana, quien lo había criado, y sabia que algo andaba mal, después a Medardo le dio por quemar todo, desde las casas hasta la torre se los siervos del castillo, lugar en el que estaba Sebastiana y sufrió quemaduras que la tuvieron en cama hasta su recuperación.

Existía un poblado, llamado Pratofungo, donde vivían las prostitutas, y que después se convertiría en poblado de leprosos, ya que en ese tiempo, la lepra era una enfermedad bastante común,

Toda persona que tuviera con lepra sería enviada a Pratofungo, ahí los leprosos producían un vino con el que vivían ebrios. Sebastiana se fue a ese lugar pues todos creían que tenia lepra debido a sus quemaduras, se fue triste siguiendo al leproso que recogía obsequios que les hacia el pueblo para no morir de hambre, y ahí esperaban su final.

El joven sobrino, andaba siempre con un doctor ingles que había naufragado y decidió vivir ahí, tenía 70 años, se dedicaba a hacer experimentos en vez de velar por los enfermos. Buscaba Fuegos Furgos, no tengo idea que sea eso, pero lo buscaba en los cementerios, pasaron una serie de aventuras, que cuando el vizconde lo llamo para que revisara a Sebastiana antes de irse, desapareció y el sobrino tuvo que buscar compañía.

Llego hasta el Monte Yermo, ahí vivían los Hugonotes, gente que escapo de Francia porque el rey mandaba cortar cabezas a quien siguiera esa religión.

El sobrino llego a escondidas y vio que estaban haciendo un tipo de oración pero ellos no estaban arrodillados o con las manos juntas, ellos se encontraban de pie con las manos a los lados, algo jalo al sobrino y quien lo jalo fue Esaú el hijo de Ezequiel, quien dirigía a los habitantes de monte yelmo, quien gritaba ¡Peste y carestía! Cuando algo se le hacía inapropiado o incorrecto,

Esaú estaba en contra de su religión, fumaba y tomaba, incluso llegaba tarde a su casa.

Enseño

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