El Vizconde Demediado

El vizconde demediado es una obra del autor Ítalo Calvino que relata la historia de un hombre que es parido por la mitad, en donde una parte es buena y la otra es totalmente malvada. Esta obra se divide en 3 partes, cuando es partido por la mitad, cuando ambas partes toman caminos diferentes y el final es cuando vuelven a unirse. El tema principal es la dualidad humana. El hombre debe ser totalmente bueno o malo Para este autor el humano tiene la capacidad de desarrollar maldad y bondad pero mantener el equilibrio entre estas dos es indispensable.

La primera parte relata como el vizconde Medardo un guerrero muy poco experimentado, mientras luchaba contra los turcos es alcanzado por una bala de cañón que lo parte exactamente en dos. Una parte de él (la mala) es salvada por los médicos, mientras que la otra parte es encontrada y salvada por unos ermitaños. La parte mala que se hacía llamar Gramo regresa a su ciudad mientras que la otra parte, Buono, decide vivir en la selva.

Ambos toman caminos muy diferentes, Gramo al regresar a su hogar hace todo tipo de maldades. Incendia casas, destruye cosechas, condena a todos a la horca a pesar de que no hicieron algo muy grave. Y algo muy curioso es que en todo camino por donde pasaba cortaba todo a la mitad. Por otro lado la parte buena vive en el bosque ayudando a los demás pero también sermoneándolos de lo que es justo hacer. Algunas personas se quejaban de Buono ya que no les gustaba que diera sermones sobre lo que no debían hacer. En una colonia de Leprosos donde las orgías y fiestas salvajes daban lugar, Buono les decía que no debían hacerlo. A los hugonotes le decía que debían compartir sus riquezas con los pobres. Muchos incluso llegaron a decir que esa parte buena de Medardo era mucho más mala que su Gramo.

El desenlace ocurre cuando ambos se enamoran de la misma mujer, Pamela y ambas parte se casarían con ella el mismo día. Cuando estas dos parte se encontraron se retaron a duelo y quedaron muy heridos, el doctor del pueblo decide salvarlos y coser ambas partes para que vuelvan a ser uno mismo. Después de estar unidas las partes buena y mala, el vizconde regresa a ser la misma persona que era antes.

En conclusión no es bueno extremarse en una cualidad, no se puede ser malo pero tampoco totalmente bueno y justo ya que podría incomodar a las demás personas que no concuerdan con nuestra manera de vivir y ver las cosas. Es de sabio aprender a buscar el equilibrio de nuestras cualidades.

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