Gordon Alport

El estudio de la personalidad es una temática que se puede visionar desde diferentes ámbitos, desde el plano psicológico retoma gran importancia debido a la amplia literatura que abordan estos aspectos. Desde esta perspectiva, se consideran los aportes realizados por Allport al estudio de la personalidad.

Para dicho autor, la personalidad es entendida como una entidad de carácter real, con rasgos únicos en cada persona y a su vez es vista como una organización dinámica al interior de los individuos.En este sentido, el carácter real que adquiere la personalidad hace de cada persona un ser único y excepcional desde todos los sentidos.

Desde esta postura, se puede inferir por qué en el campo psicológico se pueden estudiar diferentes tipos de personalidad, ya que cada individuo es capaz de desarrollar rasgos específicos de su forma de ser y que están directamente relacionados con otros factores de carácter físico, social, biológico, económico y cultural que influyen en la construcción de una serie de procesos dinámicos en el individuo.

El carácter real de la personalidad, se evidencia en el ejercicio de las relaciones sociales e interpersonales cuando hallamos distintas maneras de abordar una situación por parte de los individuos.

En su tesis Allport conceptualiza el rasgo como un sistema neuropsiquico, generalizado y focalizado capaz de convertir los estímulos en comportamientos adaptativos y expresivos. Esto refleja por qué cada individuo asume un comportamiento o conducta distinta ante diferentes situaciones reales, ya que en realidad lo que se hace presente es el funcionamiento de todo un complejo sistema que incide en el modo de actuar de las personas,

Ahora bien, en la taxonomía de los rasgos de Allport , el primero de ellos se refiere a los rasgos individuales o también conocidos como disposiciones personales. A su vez esta contempla los rasgos cardinales , centrales y secundarios, estos son exclusivos y ayudan a definir el carácter, que es uno de los aspectos más distintivos que se gestan dentro de la variedad de personalidades que se puedan observar en los seres humanos. Por ello el carácter de una persona se constituye en la base principal de la personalidad.

Esa combinación de valores, sentimientos y actitudes posibilita el hecho de que seamos capaces de que tener una percepción distinta de las cosas y de los sujetos que nos rodean. La tarea cultivar el carácter, queda muchas veces en manos de aquellas personas que suelen orientar la vida de otros

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