La Discriminación

Kant dice que los seres humanos tienen “un valor intrínseco, esto es, dignidad”, que los hace valiosos “sobre cualquier precio”. (Rachels, 2006).

Kant nos plantea el imperativo categórico y lo describe como es todo aquello que se impone, que "impera" sobre lo demás, porque es lo que “se debe hacer”, no lo que se quiera hacer sino porque uno así lo supone. Dado a que somos seres racionales debemos tratar a las personas “siempre como un fin y nunca solo como un medio”,

Refiriéndonos al contenido del 1er artículo de la Declaración Universal de los Derechos Humanos: “Todos los seres humanos nacen libres e iguales en dignidad y derechos y, dotados como están de razón y conciencia, deben comportarse fraternalmente los unos con los otros.”

Ahora bien, si las personas tienen una dignidad que les da valor en sí mismas y, si al parecer, esto no es difícil de entender, ¿por qué nuestra sociedad se empeña en minimizar este valor? ¿Por qué las sociedades continúan considerando como "mejores" a aquellas personas que tienen más dinero, poder o influencia y, por el contrario, desprecian a quienes no lo tienen?

Todos hemos sido testigos en más de una ocasión de un caso de discriminación, ya haya sido a afrodescendientes, religiosos, migrantes, mujeres, homosexuales, entre otros. Ahora, ¿Por qué existe la discriminación? Hay muchas razones, pero siguiendo el razonamiento de Kant sería porque las personas empiezan a tratar a otras como un medio de hacerse sentir más que el otro. Si alguien no te agrada, ves extrañas sus costumbres, religión, ¿Cuál es la necesidad de hacer burla y hacer sentir menos a aquella persona?

Este es un problema que existe desde hace tiempo y a pesar de que se han tomado medidas para disminuirlo, los resultados no son los esperados. Una manera de hacer valer la dignidad es darles un castigo a aquellas personas que no sigan las normas establecidas. Aquí es donde entran dos pensadores con sus distintas ideologías Emmanuel Kant con la retribución y la teoría del castigo y a Jeremy Bentham con el utilitarismo.

El primero de ellos sigue el dicho “ojo por ojo, diente por diente” es decir, responder a los demás “con la misma moneda”. Según Kant tenemos el derecho de responder a la maldad de las personas “pagándoles con la misma moneda”, pero no tenemos el derecho de violar su integridad tratando de manipular su personalidad porque son “seres racionales”. Bentham dice que el castigo está mal porque hacemos sufrir a alguien; el propone dar un “tratamiento” a estas personas con el fin de que sean productivas para la sociedad.

En mi opinión la ideología de Kant es la mejor, tal vez no sea la más ética pero a pesar de ser “seres racionales” no actuamos como tal; creo que si las personas saben que serán castigadas según la gravedad de su delito los índices de discriminación y otros

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