Mujeres Machistas

¿Soy machista aún siendo mujer? ¿Depende ésto del género? Fue la primer incógnita que paso por mi mente, y al instante sobrevino la respuesta…claro que se puede ser machista, independientemente de nuestro género. No sólo lo es aquel hombre que se piensa superior a una mujer, tanto física como emocionalmente, si también aquella mujer que considera al varón como un ser capaz de llevar a cabo acciones, que en su postura femenina ella no podría, aunque si bien es cierto tenemos nuestras diferencias, ninguna de ellas determina la superioridad entre varón o fémina.

Existen mujeres que además de ser machistas, fomentan esta cultura, ya que son las principales formadoras de esta especie llamada “macho”, al cual ellas mismas les rinden tributo, pués entre que “Tú no debes de lavar platos”, “Consíguete una mujer que te atienda” , “Ya sienta cabeza, búscate a alguien que te espere en casa para cuando regreses de trabajar”, hasta con el comentario inherente de “Sirve la comida a tu hermano”, “Plánchale tu esa camisa”, “La mujer se hizo para estar en casa”, van creando al hombre “macho” y a una mujer tolerante a ese ser.

No me considero machista, pues tengo la firme convicción de que los hombres y la mujeres, ambos como seres pensantes, debemos estar en un plano de igualdad, no en el sentido más vil feminista que masculiniza a la mujer, sino en la postura de acompañarse en todo momento, desde el plano personal hasta el laboral, buscando desarrollar no la división de labores, sino el complemento de ellas, resaltar las aportaciones que independientemente de su género puedan otorgar al beneficio de la humanidad.

Me gusta ser tratada como mujer y tratar al hombre como tal, sin que en mis palabras conlleve el hecho de separar los géneros, solamente aceptar las diferencias que son inherentes, lo cual, dicho sea de paso, hace más placentera la convivencia.

No me detengo ante una avería de auto, pero tampoco trato de arreglar lo que no sé, no muestro negativa al solicitarme el favor de planchar una camisa, pero tampoco es esto mi prioridad de vida. Fomento con el ejemplo la equidad de género, simplemente doy el trato que me gusta recibir.

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