PRACTICAS PROFESIONALES

INFORM DE PRACTICAS PROFESIONALES

Para dar inicio al reporte empezaré por enfatizar que Barucck es una agencia de publicidad relativamente nueva que entre la diversidad de proyectos que genera y obtiene como contratos, existen muchas ocasiones en donde Barucck tiene que hacer la función de seleccionar personal para campañas determinadas, campañas que le son asignadas y en donde el cliente, como parte del contrato, pide a la agencia la selección de los individuos que participarán en las activaciones y eventos. Esta tarea responde directamente al núcleo de recursos humanos puesto que se deben evaluar las características de las personas que acuden a buscar el trabajo. Dentro de la empresa se me asignó colaborar en la selección de personal para algunas campañas. El personal consiste en edecanes, GO´s y promotores, que son componentes todos necesarios en campañas de publicidad.

Parte de mis prácticas consistió en revisar varios currículos de los interesados e ir clasificándolos, primero, en categorías obvias, como hombre y mujer, esto debido a que los respectivos puestos, edecán y GO, corresponden cada uno a mujeres y hombres. Hecho esto, se me pidió darles, ahora sí, una lectura un poco más detallada y tratar de inferir con los datos del currículo si la persona interesada es o no apta para el trabajo. Los factores a tener en cuenta fueron, evidentemente, como primer lugar, la estabilidad en trabajos pasados, porque una campaña publicitaria de activación, aunque a veces dura menos de un mes, necesita de gente muy comprometida y puntual. En segundo lugar, como factor a subrayar tuve que preguntar disponibilidad de horario a cierto número de interesados. Señalo que fue cierto número porque el trabajo se repartía entre dos personas más además de mí. La disponibilidad de horario siempre será, en campaña larga o no y en cualquier trabajo, una característica determinante para tomar en cuenta a un interesado.

Aunado a lo anterior, como ejemplo, doy el testimonio de una activación de un solo día para Toyota, en donde únicamente solicitaron edecanes. Dichas edecanes debían cumplir con un esquema dado previamente por la gente de Toyota. Ese también fue trabajo mío. Pedían edecanes de más de 1.65 de estatura y, por decirlo de alguna manera, muy atractivas físicamente, de forma que pudieran llamar la atención hacia el evento esencial. Cuando las mujeres autodenominadas edecanes envían a la agencia sus currículos, estos regularmente vienen (y porque así se solicita en el medio) con archivo pictográfico denominado “book”, que a grosso modo es un compendio de fotos de la edecán en donde el solicitante puede discernir más claramente si la interesada es apta para el perfil sugerido. En el “book” vienen datos relativos a estatura y a veces tallas, por lo que en el caso de la campaña de Toyota, mi trabajo consistió en reunir alrededor de veinte currículos, revisar los “books” y descartar a quienes no cumplían el perfil para, una vez reducido el número inicial, darme a la tarea de llamar a cada una de las que cumplían con el perfil y corroborar su disponibilidad. La activación necesitaba únicamente dos edecanes por un lapso de cuatro horas y todo resultó tal cual lo pidió el cliente.

Y así, en campañas de menor rango, mis prácticas consistieron en la revisión somera de perfiles de personas en búsqueda de trabajo para campañas publicitarias. Esta revisión es somera porque en la mayoría de las ocasiones este tipo de campañas requieren de velocidad y por lo mismo de asertividad. Toda evaluación al prospecto debe recaer, en el caso concreto de las activaciones, en los datos proporcionados por el currículo así como de datos recogidos en llamadas o breves entrevistas. Una agencia de publicidad joven es pequeña pero ajetreada, de manera que la labor de selección de personal para campañas y activaciones es frenética y debe ser muy precisa, infiriendo

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