PRINCIPIOS DE PROGRAMACION NEUROLINGUSITICA

Principios de programación Neurolingüística

La PNL se basa en lo que llama sistemas de representación sensorial que son el sistema visual, el auditivo y el kinestésico - información que recibe nuestro cerebro de los movimientos del cuerpo - . Lo que diferenciará a cada sujeto es que unos usarán de forma predominante la visión para recoger información de su entorno, en detrimento de los otros dos canales,- auditivo y kinestésico - mientras que otros sujetos usarán de forma predominante el canal kinestésico a costa de los otros dos. Para la PNL una buena comunicación con nuestro interlocutor supone adaptarnos al estilo de captar información de nuestro cliente - por poner un ejemplo en un contexto comercial - y para ello debemos fijarnos en determinados comportamientos de nuestro interlocutor que nos indicarán de qué forma - verbal, visual o kinestésica - debemos mostrarle las ventajas de la idea que deseamos transmitir.

El tramado de postulados básicos de la PNL cimienta los principios esenciales o soportes que establecen cómo se percibe la conducta. Estos principios permiten practicar la PNL como una ciencia aplicada.

En este sentido, la PNL se basa en principios muy distintos de la psicología tradicional. Mientras la psicología clínica se ocupa de describir dificultades, catalogarlas e indagar sus causas históricas, la PNL se interesa por cómo nuestros pensamientos, emociones y acciones trabajan en conjunto, aquí y ahora, para producir nuestras experiencias. Por otra parte, el desarrollo de la PNL en el ámbito empresarial ha implicado nuevas pautas de desarrollo, con especialistas de otros mundos alejados de la psicología, que ahora entregan sus aportes al enriquecimiento de otros ámbitos de la actividad humana: ventas, negociación, liderazgo, etcétera, son aquellas áreas de potente contribución de la PNL.

Para los efectos de este documento, y como un aporte a su mejor compresión, haremos un desglose general de los principios de la Programación Neurolingüística.

El mapa no es el territorio

Nuestros mapas mentales del mundo no son el mundo. Respondemos a nuestros mapas, más que directamente al mundo real. Es más fácil actualizar los mapas, especialmente en lo relativo a las emociones e interpretaciones, que intentar cambiar el mundo.

Todos interpretamos lo que sucede a nuestro alrededor a través de nuestros cinco sentidos. Lo que usted cree sobre lo que ve, oye y siente se basa en la experiencia de toda su vida, que filtra cualquier información que le llega a través de los sentidos. Lo que para usted parece bueno podría parecer malo para otra persona. Lo que es útil a una persona Z para la persona X puede no servirle. Nuestra única interpretación de todo lo que nos rodea se convierte en un mapa mental personal. Este mapa personal conforma nuestra realidad: nuestra comprensión o conciencia. Pero el mapa mental de Z es diferente del de X o del suyo. Cada uno de nosotros vemos las cosas de forma diferente. Y ninguno de nuestros mapas es la realidad objetiva.

Toda experiencia tiene una estructura

Nuestros pensamientos y recuerdos tienen su propio patrón. Cuando modificamos dicho patrón o estructura, nuestra experiencia cambia automáticamente. Podemos, pues, neutralizar los recuerdos dolorosos y enriquecer aquellos que nos resulten útiles.

Si una persona puede hacer algo, cualquier otra puede aprender a hacerlo.

Podemos aprender el mapa mental de un realizador y hacerlo nuestro. Demasiadas personas piensan que determinadas cosas son imposibles, y ni siquiera lo han intentado. Cuando exista algún límite físico o ambiental, el mundo de la experiencia te lo hará saber.

Mente y cuerpo son partes del mismo sistema

Nuestros pensamientos influyen de forma instantánea en la tensión muscular, la respiración y las emociones. Y todo ello afecta a su vez a nuestros pensamientos. Aprendiendo a cambiar cualquiera de estos aspectos,

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