Perfiles criminologicos.Escena del crimen

La escena del crimen es el lugar en el cual se ha producido el delito, y en la cual encontraremos  gran información para encontrar al criminal.

La inspección ocular  tiene como finalidad comprobar el delito, el artículo 282 de Lecrim dice existe la obligación de averiguar la comisión de delitos públicos y esta se inicia con la comprobación de que efectivamente se ha producido, luego hay que realizar las diligencias necesarias para descubrir delincuentes como la búsqueda de indicios que aporten información sobre la persona que ha cometido el delito, la investigación comienza con la investigación de la escena.

Es de gran importancia tomar este proceso de forma rigurosa deberá ser lo más precoz posible, preservando la escena de posibles perturbaciones y contaminación acordonándola ya que esta nos dará mucha información. El trabajo en la escena del crimen debe ser pausado, amplio y escrupuloso.

Durante el siglo XIX no se trataba con cuidado la escena, como nos ejemplifica el video “La escena del crimen” con los asesinatos de la calle, la  gente (vecinos, familia…) limpiaban la sangre, e incluso movían el cuerpo lo que estropeaba totalmente la escena y los indicios que ella nos pudiera revelar.

Cuando nos encontramos un cadáver se debe proceder mediante la inspección ocular, con una primera fase de identificación en la que se determinará: quien es la víctima, cuánto tiempo ha pasado desde la muerte y la causa de la misma. La ciencia forense se reveló entonces como esencial para conseguir descifrar estas escenas,  el patólogo forense es el profesional que determina la causa de la muerte que podrá ser: homicidio, suicidio, natural, accidental. Aplicando los principios y conocimientos médicos al campo de la ley el patólogo determinara  así si la muerte es sospechosa o no para en caso de si fuera sospechosa empezar con la investigación como hemos acabado de detallar.

De los seis casos que muestra el documental extraemos un componente en común, que es el interés del asesino por deshacerse del cuerpo, y así despistar a las autoridades y salirse con la suya. Observamos conciencia forense, que son los actos de precaución que se llevan a cabo para ocultar el crimen, las acciones  antes, durante y después para ocultar, confundir , despistar e impedir su identificación.

Encontramos esta intención de “despistar” en el crimen de Heick el autor del primer asesinato que hemos visto que motivado por conseguir dinero, consigue embaucar a Olive Duran y mediante una aproximación con artimañas  la lleva hasta su taller y a partir de aquí no se la vuelve a ver. Una amiga denuncia su desaparición, y al haberse visto en compañía de Heick el cual también vivía en el Hotel Onslow en el cual ella residía, se investiga a este, y encuentran que ya había estado en prisión por fraude, revisaron el taller y encontraron un recibo de la lavandería de Olive, así situando a la víctima en dicho taller  lo interrogaron y la sorpresa fue la confesión de este al sentirse seguro de que al haber puesto el cuerpo en acido había destruido toda evidencia del crimen, ya había realizado estos crímenes antes y se sentía seguro, su error fue justamente está vanidad ya que al buscar en el barril encontraron indicios que los llevo a la víctima: piedras en el riñon, piezas dentales (comprobadas en el registro), un asa de un bolso y restos de huesos que padecían artritis, enfermedad de la cual la victima fuera tratada. El termino corpus delictus en el cual se basaba Heick para decir que sin el cuerpo no había crimen,  se refiere a cualquier indicio que por pequeño que sea nos pueden dar datos relevantes para la resolución del caso.

En el siglo XIX no había registros dentales, por lo que era más fácil despistar a la policía y ocultar la identidad de la víctima.

Ya nos referíamos al principio de este texto a los patólogos forenses entre los que destacamos al patólogo británico, Bernard Spilsbury, y aposteriori de este Keith Simpson otro pátologo de gran importancia, en la ciencia forense.

Bernard Spilsbury fue determinante en los tres casos siguientes:

• El caso de Crippen (1910): Fue el primer caso en el que Spilsbury destaca. Amigos de la victima denunciaron su desaparición cuyo marido justificó, al ver sospechosa la desaparición de ella y con su inminente su salida del país, entran en la casa del doctor Crippen y  encuentran enterrados restos humanos, la muerte fuera producida por veneno, para inculpar a Crippen había que constatar que la víctima era su mujer, se basaron para ello en una cicatriz que coincidía con una cicatriz de apendicitis, que ella también tenía. La confianza que mostró Spilsbury al defender su postura fue determinante para convencer al jurado y declarar culpable a Crippen.

• El caso del Homicidio del chalet de Crumbels: En este caso cobra gran importancia  el minucioso trabajo de Spilsbury y lleva a la creación de la “bolsa de homicidios” aun usada hoy en día. La mujer de Mahon pone en la pista a la policía sobre este, ya que encontró, una maleta con ropa de mujer manchada de sangre y un cuchillo. Entraron en el Chalet de Crumbles alquilado por Mahon, para verse con Emily Keint una de sus amantes, y encontraron de 900 y 1.000 trozos de carne humana. Spilsbury realizó un trabajo magistral montando el cuerpo, gracias a esto se contradijo a Mahon quien dijo que la muerte de esta fuera accidental que se golpeara la cabeza con un cubo, Spilsbury demostró que tenía más hematomas y el golpe no coincidía con el del cubo, estos indicios  junto con la compra que había realizado el día antes de un cuchillo y una sierra demostraron la intencionalidad y premeditación del crimen por el que Mahon fue culpado. Este caso también es relevante destacar la necesidad de la “bolsa de homicidios” con todo lo necesario para la recogida de pruebas y la protección de estas,  Spilsbury se sintió horrorizado al ver a la policía recoger la carne humana con las manos desnudas, esta bolsa contiene: guantes, polvos de huellas, tarros de muestras, artículos para embalar, cinta, equipo de protección etc.

• El caso de Norman Thorne puso entre las cuerdas a Spilsbury  y su reputación fue perjudicada, la denuncia de la desaparición de Elsie Cameron centraron la vista sobre su novio Norman Thorne un ex marino que había montado una granja de pollos . investigaron a Thorne y encontraron en el gallinero el cuerpo de Elsie Cameron enterrado y descuartizado. Se escudó en que discutieran y ella se había suicidado ahorcándose de una viga, sin embargo el cadáver no tenía marcas en el cuello, a pesar de esto se reclamó una segunda autopsia y el testimonio de Spilsbury se puso en duda.  Al presentarse la evidencia de que la viga estaba intacta  y no pudo haberse ahorcado se declaró a Thorne culpable.

 Holmes&Holmes dijeron “Cuanto más se conoce a la víctima más se conoce al criminal” esta frase la ponemos de relieve en el caso siguiente:

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