Problemas Emocionales
Enviado por juanitam85 • 25 de Octubre de 2012 • 6.932 Palabras (28 Páginas) • 864 Visitas
CONFLICTIVIDAD FAMILIAR
SEPARACIÓN Y DIVORCIO
SEGUNDAS PAREJAS
ALUMNOS EN DESVENTAJA SOCIAL
CARENCIAS AFECTIVAS
ALUMNOS MALTRATADOS
V . PROBLEMAS EMOCIONALES Y DEL COMPORTAMIENTO DERIVADOS DE SITUACIONES FAMILIARES ESPECÍFICAS
CONFLICTIVIDAD FAMILIAR
ALUMNOS CON PROBLEMÁTICA FAMILIAR
La conflictividad familiar manifestada en la familia por la existencia más o menos manifiesta de discrepancias, hostilidad, agresividad, distanciamiento afectivo de la pareja, etc. está a la base de múltiples problemas emocionales y adaptativos de los alumnos.
SÍNTOMAS DE CARACTER DEPRESIVO:
Baja autoestima con sentimientos de inferioridad y poca valía.
Tendencia a la autopunición.
Necesidad y dependencia afectiva por carencia.
Inhibición social y retraimiento.
Tendencia a la inculpación.
Ideas y tentativas de suicidio.
Sentimientos de ser diferente.
SÍNTOMAS DE CARÁCTER ANSIOSO:
Tensión muscular.
Ansiedad generalizada.
Existencia de fobias.
Problemas psicosomáticos.
Miedos e incertidumbres.
Problemas de sueño y/o alimentación.
Odio a uno de sus padres.
SÍNTOMAS COMPORTAMENTALES:
Déficit: Inhibición y pasividad relacional. Timidez.
Exceso: Agresividad e ira, comportamientos disruptivos o disociales.
Conductas sustitutivas: alcohol y drogas.
Búsqueda de compensaciones afectivas fuera del hogar (pandilla, sexo, etc.).
Problemas con las figuras de autoridad.
Rebeldía.
Baja integración escolar y problemas de rendimiento.
SEPARACIÓN Y DIVORCIO
ALUMNOS HIJOS DE PADRES SEPARADOS
CONCEPTOS PREVIOS
Separación y divorcio no tienen el mismo significado, aunque tienden a utilizarse de igual manera. Vamos a distinguir y aclarar estos conceptos:
SEPARACIÓN DE HECHO: No existen documentos oficiales, tan solo una ruptura de la vida conyugal.
SEPARACIÓN O DIVORCIO DE DERECHO: Existe una Sentencia de Separación o Divorcio o un Auto de Medidas Provisionales. En esos documentos se regulan las relaciones padres-hijos, que en algunos casos pueden estar pactadas de mutuo acuerdo.
Las separaciones y divorcios (en adelante separaciones) constituyen acontecimientos que cada vez se observan con más asiduidad dentro de nuestra sociedad.
La separación supone un acontecimiento vital que rompe o interrumpe el ciclo vital de la familia con repercusiones profundas en los integrantes de la misma, ya que supone además de las cuestiones estrictamente legales (ruptura del contrato legal) la necesidad de un reajuste brusco en la dinámica familiar.
La separación se plantea como una solución pero es la expresión de un fracaso. Fracaso porque nadie prácticamente se casa para separarse sino que suele acontecer como resultado de un deterioro relacional que suele pasar de un divorcio emocional a un divorcio legal. Solución que acarrea nuevos problemas: sería una solución problemática. Con ello no queremos decir que no sea necesario o positivo separarse. Muchos argumentan que es más patógena para los miembros de la familia –sobre todo lo hijos- una situación familiar conflictiva y adversa sostenida que los posibles efectos de la separación. También que no es necesariamente patógeno. Pero corresponde a otros juzgar el bien o mal, la procedencia o no de tales decisiones. A nosotros nos basta con estudiar el fenómeno, ver como condiciona la vida familiar y personal y ver que posibles actitudes podemos adoptar ante lo que es una realidad social que ha ido en progresión creciente. Y que sin duda se trata de una situación de riesgo para la estabilidad personal de los integrantes de la familia y de los propios niños.
FASES DEL PROCESO DE SEPARACIÓN
PREVIA: Existe en la familia un conflicto abierto o solapado. Lo relevante para los individuos es cómo era el clima familiar en esa etapa. El impacto emocional de una situación que ha sido crónica en el tiempo dependerá en buena medida del tipo de emociones de los padres y de las actitudes y modos relacionales desplegados en la convivencia.
SEPARACIÓN EN SI MISMA: El proceso propio de la separación conlleva desequilibrios y desorganización en la dinámica familiar. Trae consigo un procedimiento legal, una necesidad de replanteamiento económico, una ruptura mayor o menor de la convivencia, cambios en los vínculos afectivos, repercusiones en el entorno familiar más extenso y de relaciones sociales.
En mayor o menor medida pueden aparecer en esta etapa un cierto grado de afectación o convulsión psíquica.
POSTERIOR A LA SEPARACIÓN: Se da un período de acomodación a la nueva situación que precisa ir estabilizándose y definiéndose. Para algunos autores esta etapa dura aproximadamente entre 1 y 3 años, aunque en algunos casos se puede cronificar durante mucho tiempo la etapa anterior. Pero es de esperar que los problemas emocionales y relacionales se vayan reduciendo.
RESOLUCIÓN: Se debe de producir un reajuste y superación de la situación. Cada miembro es de esperar que se reconstruya social y laboralmente y que afectivamente esté recuperado y estable estando ya diferenciado de la situación familiar rota y establecido como persona independiente, autónoma de la misma.
REACCIONES DE LOS PADRES
Son múltiples y variadas las posibilidades de reacción de los padres ante la separación. La insatisfacción, las diferencias existentes, la falta de armonía, desavenencias, etc. se tienen que plasmar en una decisión y eso conlleva estrés. Pueden aparecer múltiples y variados sentimientos que van desde la incertidumbre por la situación y anticipaciones negativas sobre el futuro, inseguridad, culpabilidad o inculpación del otro, sentimientos de rechazo y abandono, deseos de venganza, sentirse traicionado, de haber malgastado la vida, sentimientos de soledad y baja autoestima, sentirse incompetente, tristeza o depresión, intentos se suicidio, regresiones afectivas, ansiedad, preocupación por la salud, miedo por los hijos o por perderlos, por el qué dirán, dependencia y búsqueda de afecto y cariño, cierta promiscuidad sexual, celos, sentimiento de amor no correspondido, humillación al otro, confusión, desorientación, ambivalencia afectiva
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