Práctica Emociones y Conflicto

CASO PRÁCTICO: EMOCIONES Y CONFLICTO

1.¿Cuáles cree que son las emociones predominantes en Julia tras el despido? ¿Por qué?

Las emociones predominantes en Julia tras el despido en la empresa donde trabajaba, Basic creo que pueden ser, por un lado, sorpresa, porque en ningún momento se esperaba ser despedida y menos después de su buena trayectoria en la empresa; también creo que siente decepción, al notar que le han mentido en la carta que le han enviado explicando su despido, cuando realmente sabe que ya están sustituyendo su puesto; y por último rabia, tanto por lo explicado anteriormente, como por verse con hipoteca, su hijo, y no saber cómo afrontar la nueva situación.

2.Según el modelo de Redorta, Obiols y Bisquerra, ¿cómo cree que puede de gestionar Julia este conflicto?

El modelo de Redorta, Obiols y Bisquerra, es un modelo llamado lectura de emociones. Este modelo se basa principalmente en dos proposiciones: la correcta discriminación de diez emociones relevantes, y la acción inmediata recomendada a partir de la emoción detectada.

Como he mencionado anteriormente, las emociones principales que experimenta Julia tras su despido son la sorpresa, decepción y la rabia. Para poder llevar a cabo las recomendaciones necesarias para “manejarlas” debe reconocerlas lo antes posible y, una vez identificadas abordar esas recomendaciones.

Julia puede gestionar el conflicto de tal manera que ante las emociones de la sorpresa y la decepción al aportarle información le puede servir para orientarse y prevenirlas de acciones futuras; y ante la emoción de la rabia, es imprescindible percibir la realidad de manera objetiva. Esto nos ayuda a buscar una solución adecuada y superar el conflicto.

3.¿Cuál es el estilo de afrontamiento que usa Julia ante el conflicto? ¿Y el de sus jefes? ¿Por qué?

Julia utiliza un estilo de afrontamiento ante el conflicto evitador ya que ella estuvo hasta el último momento del embarazo en la empresa y dejó todo preparado para su vuelta, además ella se siente bien realizando su trabajo y una vez que la han despedido aún sabiendo la verdad sobre el despido no se ha enfrentado a ellos, ignora el problema sin exigir, ni recibir explicaciones de ningún tipo por parte de sus superiores. No enfrenta su despido injusto, ni lucha por su trabajo. . En cambio, el estilo de afrontamiento de sus jefes es el competitivo, solo tienen en cuenta sus propias necesidades sin tener en cuenta las de ella, ni a la relación que tenían con la misma y, sin embargo, ofrecen una gran importancia a los resultados de la empresa y los objetivos que esta consigue. En definitiva, los jefes solo buscan satisfacer sus propios intereses.

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