Psi. Diferencial

Conducta: En términos de respuesta, rendimiento o ejecución observables (que puede ser motora, verbal o física) (Pueyo, 1996. p. 30).

Ejemplo: 

Hábito: Son conexiones o asociaciones consistentes, duraderas y estables entre estímulos y respuestas. Son las bases de la conducta aprendida y permiten una explicación de las tendencias a comportarse del sujeto que son una alternativa a la suposición de que la estabilidad y consistencia de la conducta se deben a los atributos psicológicos o rasgos del sujeto (Pueyo, 1996, p. 69).

 Ejemplo: Hàbitos de sueño.

Rasgo: Puede entenderse como una disposición personal a comportarse de manera parecida en muchas y diversas situaciones. Un rasgo, a su vez, puede definirse como un constructo hipotético que resume la tendencia de un individuo a comportarse de manera similar en diversas situaciones (Pueyo, 1996, p. 69). 

Los rasgos por su propia naturaleza pueden ser agrupaciones más o menos extensas de hábitos de conducta y, por tanto, hay rasgos amplios o restringidos (Pueyo, 1996, p. 71).

Los rasgos nunca son directamente observables, se infieren de las conductas regisradas (Pueyo 1996, p. 76).

 Ejemplo: Rasgos de naturaleza cognitiva (aptitudes).

Estado:  Estos representan la plasmación concreta de los efectos de la situación sobre las disposiciones del sujeto. Es una respuesta compleja, caracterizadas por su menor intencidad y su mayor duración (Pueyo 1996, p. 76).

 Ejemplo: Estados de euforia, estados depresivos.

Tipo:  Es un conjunto de rasgos, el tipo es un sistema de clasificación y descripción, para el estudio científico de las diferencias individuales (Pueyo 1996, p. 74).

Ejemplo: En el temperamento: tipo colérico, sanguíneo, melancólico y flemático.

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