Psicometría

Introducción

Desde tiempo muy remotos la humanidad se ha preocupado por cuantificar las cosas que hay a su alrededor, de ahí el inicio de las matemáticas y con ellas la medición, medimos distancias, tiempos e incluso ahora medimos conductas o comportamientos.

Los instrumentos utilizados por la psicología para medir características de un sujeto son los test psicológicos, que se dividen en dos grandes grupos: las pruebas psicoléxicas y las pruebas psicométricas.

Los instrumentos de medición tienen una gran importancia para la psicología moderna, más no significa que sean absolutas, ni que gocen de total aceptación por todos los involucrados, aún tienen errores y han inspirado fuertes discusiones por parte de los expertos. Con todo y las grandes críticas que existen en torno a ellas es indudable, que los test nos ayudan a estandarizar ciertos requerimientos sociales en la toma de decisiones. Es fácil ver el gran impacto que tienen en nuestra vida diaria, por ejemplo, durante nuestra niñez realizamos infinidad de evaluaciones o test que pretenden medir los conocimientos adquiridos y en base a los resultados, se determina si aprobaste el curso o no, también pueden ser utilizadas para determinar si un alumno requiere ser tratado por el departamento de “educación especial”, aun después de concluida la escuela muchas empresas utilizan los test para medir las habilidades deseables en sus futuros empleados y en base a los resultados obtenidos en dichas pruebas el reclutador de recursos humanos determina si se contrata o no al sujeto que realizo el test.

La finalidad de este trabajo es tratar de explicar la importancia y el alcance de los test como un instrumento confiable en la evaluación psicológica de un sujeto.

Palabras clave: medición, evaluación psicológica, test.

En sus inicios la psicología era considerada una pseudociencia debido a que carecía del riguroso método científico en sus teorías, y se basaba únicamente en el análisis del comportamiento observable. Pero estos procedimientos carecían de objetividad y eran duramente criticados. Los primeros intentos de dar objetividad a los estudios psicológicos los podemos encontrar en los aportes realizados por Francis Dalton o Alfred Binet, quienes se preocuparon por “medir” las diferencias individuales, así como la relación que existía entre la inteligencia y la genética del individuo, es decir, su herencia. Estos aportes motivaron a los psicólogos a tratar de crear instrumentos que fueran capaces de medir los atributos psicológicos de los seres humanos.

La medición de esta manera toma un papel fundamental en la objetividad de los estudios psicológicos.

De acuerdo con (Fernández, 1998) ”La necesidad de medir es evidente en la mayoría de las actividades técnicas o científicas. Sin embargo, no interesa sólo contar con medidas sino también saber si dichas medidas son válidas… La validez de la medición en cualquier disciplina técnica o científica se basa en el respeto a los principios de la teoría general de la medición (en concreto, nos apoyaremos en la llamada teoría representacional de la medición).

Esto nos dice que para que un test tenga validez, debe probar que mide lo que dice que mide, realizando una serie de procedimientos y pasos estadísticos que determinen un grado de validez de la prueba.

El fundamento de la teoría representacional consiste en que toda medición debe asegurar una adecuada representación del atributo real medido mediante los símbolos o números asignados. Una representación por medición de un atributo de una entidad es adecuada si es coherente con la idea conceptual que sobre dicho atributo es comúnmente aceptada por los expertos. (Fernández, 1998)

La función primordial de los test es la de evaluar atributos humanos, bajo el supuesto que el sujeto que los posee contestará correctamente los reactivos que califican este atributo, y en función del número de reactivos contestados correctamente se puede decir si el sujeto tiene o no el atributo medido. Pero, debemos tener claro los test no son absolutos y que por sí solos no pueden lograr la confiabilidad de un proceso evaluativo. Se necesitan además otras herramientas que las apoyen y que el psicólogo que las utiliza las conozca y sepa utilizar. Jamás podrá caer toda la responsabilidad de evaluación sobre las pruebas.

Los test constituyen seguramente la tecnología más sofisticada de la que disponen los psicólogos para ejercer su profesión, por eso no es infrecuente que la sociedad identifique a los psicólogos con los test. (Muñiz, http://www.papelesdelpsicologo.es/, 2010)

La persona de realizar la evaluación psicológica debe conocer y estar bien familiarizado con la prueba, así como tener un fundamento teórico de la misma, manejar bien la técnica de aplicación y conocer la historia clínica del sujeto a evaluar, también

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